No es que sea un gran retroceso, comparado con las cifras promedio de la provincia en los últimos tiempos, sin embargo, notorio sí es. Lo han manifestado las autoridades desde el comienzo de la pandemia: mientras exista un caso hay motivos severos de preocupación. Y los 992 positivos al cierre de este domingo (contra los 606 del sábado) tensan la cuerda.
La validación estuvo más clara en la conferencia de prensa que cada día ofrece el especialista de segundo grado en Higiene y Epidemiología y metodólogo docente del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, José Ramón Artigas Serpa: “Los 992 confirmados son autóctonos, todos con fuente de infección como contactos de casos confirmados, lo que lleva al territorio a una tasa de incidencia de 227 por cada 100 000 habitantes.
“Todos los municipios incrementan sus tasas, excepto Baraguá, con mayor énfasis en los de Ciego de Ávila, Majagua, Chambas y Ciro Redondo, en ese orden.”
Revisando cifras, Artigas Serpa explicó que “de los 992 confirmados, 247 ya estaban ingresados en Centros de Atención al paciente COVID; 89 en hospitales, y los restantes provienen de la Atención Primaria con ingresos domiciliarios. Un total de 27 había recibido las tres dosis de Abdala, de ellos 24 con más de 15 días de la inoculación”.
En relación con la vacuna, insiste el especialista en que “las personas deben asumir una conducta responsable, en tanto no es patente de corso, y no existe el efecto rebaño o colectivo; por lo cual pervive el riesgo de contagio, aunque el sistema inmunológico esté más preparado para defenderse.
“Al cierre del 15 de agosto fueron confirmados 147 pacientes en edades pediátricas: tres menores de un año; 24 de uno a cuatro años; y 120 de cuatro a 18; lo que evidencia la necesidad de reforzar las medidas hacia el interior de los hogares y las familias.”
Ciego de Ávila cuenta hoy con 18 eventos de transmisión comunitaria, de ellos solo uno institucional —en el Hogar de ancianos del municipio de Ciro Redondo— , con fecha probable de cierre para el 24 de agosto, si no aparece un nuevo caso. De ser así, se extiende el cierre por otros 14 días.
Suman actualmente 681 controles de focos — solo dos institucionales—, y hasta este domingo quedaron pendientes de resultados 1 652 PCR-RT (de las 2 797 muestras tomadas el día anterior); mientras que fueron detectados 505 sospechosos a través de la pesquisa activa.
Desde el inicio de la pandemia, el territorio avileño ha confirmado un total de 35 896 infestados con el SARS-CoV-2 y, en lo que va de año, se lamenta el fallecimiento de 523 personas, cifra que dispara las alarmas al compararla con los 18 decesos de 2020.
Debieran, entonces, esas mismas alarmas, “dispararse” en el autocuidado y la rigurosidad en el cumplimiento de las medidas sanitarias, desde el terreno individual; y la observancia del nivel de satisfacción de la población, desde el terreno institucional, en relación con el cumplimiento de los protocolos de atención, en dependencia de las categorías de riesgo: bajo, medio o alto del sospechoso o paciente COVID.
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