El asalto a Morón
Los fuertes circundantes se defendieron con disparos, que no causaron bajas a los asaltantes, quienes, luego de un tiempo en el lugar, se retiraron hacia La Serrana.
Los fuertes circundantes se defendieron con disparos, que no causaron bajas a los asaltantes, quienes, luego de un tiempo en el lugar, se retiraron hacia La Serrana.
Cuando llegó a la Ciudad de los Portales, en 1870, procedente de Sancti Spíritus, tenía apenas 700 pesos; al fallecer, el 31 de julio de 1930, su capital superaba los ocho millones.
En ocasión del aniversario 60 del asesinato del joven Pedro Martínez Brito, destacado líder estudiantil.
A casi 150 años de promulgada la primera Ley de leyes en Cuba, la Reforma Constitucional es una responsabilidad que involucra a todos...
A mediados de junio de 1958, cuando la tiranía batistiana arremetía con la Operación FF en la Sierra Maestra con el objetivo de eliminar al Ejército Rebelde, los revolucionarios avileños dieron un paso decisivo.
En horas de la mañana del lunes 14 de junio de 1875, un hecho fortuito se convertiría en una aplastante derrota para las tropas españolas destacadas en Morón.
Durante algunos años se ha venido estudiando el surgimiento y desarrollo del Partido Comunista de Cuba como vanguardia de la Revolución Cubana.
La noche del 26 de mayo de 1876 la pequeña localidad de Ciego de Ávila entró en las páginas de la forja de la nación cubana, mediante el protagonismo del ilustre dominicano-cubano Máximo Gómez Báez.
El 20 de enero de 1881 el vapor Felicia llega a La Guaira. Llevaba a bordo a un joven de frente despejada, inquieto, que fijaba cada detalle de la exuberante naturaleza. Era José Martí, el Apóstol de la Independencia de Cuba.
“Cuentan que un viajero llegó un día a Caracas al anochecer, y sin sacudirse el polvo del camino, no preguntó dónde se comía ni se dormía, sino cómo se iba a donde estaba la estatua de Bolívar (…)"
Tal y como reporta el teniente coronel José Medina, el ataque e incendio del embarcadero de Morón sucedió el 16 de mayo de 1876.
“Yo te ruego, Ignacio idolatrado, por ellos, por tu madre y también por tu angustiada Amalia, que no te batas con esa desesperación que me hace creer que ya no te interesa la vida. ¿No me amas?"