En tiempos en que el país atraviesa una etapa de contingencia energética, no está de más mirar hacia lo interno de los hogares y de las empresas estatales para cerrar esas brechas por donde se escapa la eficiencia y se acrecienta el consumo de electricidad injustificadamente.
Ulises Gutiérrez Ramírez, director de la Oficina Nacional para el Control al Uso Racional de la Energía (ONURE) en la provincia, explicó a Invasor las acciones que se realizan tanto en el sector estatal como residencial del territorio para contribuir al ahorro de energía eléctrica y disminuir la demanda diaria.
Precisó que en el sector estatal se aplica la instrucción número 3 del Primer Ministro de la República de Cuba, Manuel Marrero Cruz, que indica tomar acciones de ahorro, fundamentalmente en los horarios de máxima demanda de 11:00 am a 1:00 pm y de 5:00 pm a 9:00 pm, en tanto en el residencial se exhorta a la población a desplazar el uso de los climas para el horario de la noche y los equipos de cocción, acomodarlos, dentro de lo posible, en horarios fuera del pico.
Gutiérrez Ramírez señaló que una forma de economizar es mantener una diferencia de temperatura proporcional entre la del medio ambiente y la del equipo de aire acondicionado, pues cuando es muy grande la diferencia, no se logra enfriar lo que queremos y en cambio se eleva el gasto de energía.
Ejemplificó el caso de que el ambiente sea de 30 grados y el clima esté a 16, nunca se alcanzará esa temperatura, pero el equipo trabajará en directo y no disparará el termostato.
La ONURE, subrayó el directivo, cuenta con varios grupos de trabajo, uno de los cuales es el de control energético, que se encarga de hacer inspecciones integrales al sector estatal para chequear tanto la electricidad como el combustible. Ese grupo también realiza inspecciones de contingencia para conocer si las empresas cumplen las medidas orientadas para el período, además, efectúa despachos integrales en las oficinas de la entidad, con las empresas incumplidoras o que hayan incurrido en alguna deficiencia.
Citó, entre las que más se repiten, la carencia de hermeticidad en los locales, lo que hace que se escape el aire frío que generan los climas, la falta de control de la energía (bitácora) contemplado en la Resolución 52 del 2013, para saber cuánto se consume, y el deterioro de las tuberías que transportan fluidos tanto fríos como calientes en distintos centros estatales.
A partir de las deficiencias detectadas, acotó, surgen los potenciales de ahorro y ejemplificó que tuberías mal revestidas requieren mayor consumo de energía para lograr el mismo efecto de frío o calor, mientras el aislamiento térmico adecuado en las calderas que producen vapor evita escapes y ahorra petróleo o Diésel.
Además de velar por el cumplimiento de estas indicaciones, la ONURE también se ocupa de que cada centro estatal se acoja al programa energético diseñado y proyecte acciones que permitan aumentar la eficiencia o emplear alguna fuente renovable, dígase calentadores solares o paneles fotovoltaicos, entre otras.
Asimismo, a través de sus especialistas en los municipios, atiende círculos de interés en las escuelas, como una forma de educar a los estudiantes en el ahorro y que ellos puedan trasladar las enseñanzas a sus hogares.
En paralelo, también ponen en práctica la campaña comunicacional Utiliza la energía conscientemente, mediante la cual aconsejan y aportan medidas para usar los equipos electrodomésticos de manera racional.
Inicia Inspección Integral, Grupo de Control Energético de la Onure Ciego de Avila, a la Empresa Cárnica del territorio, perteneciente al MINAL. Por el #UsoRacionaldelaEnergia pic.twitter.com/fTTpRPPqPk
— Onurecav (@Onurecav2) May 8, 2024