A más de 200 kilómetros (km) creció la infraestructura hidráulica en el destino turístico Jardines del Rey con la construcción de la conductora de agua potable Cayo Coco-Romano-Paredón Grande, de unos 31 km de longitud, que está en fase de terminación y debe realizar las primeras pruebas a mediados del presente mes.
El costo de la obra supera los seis millones de pesos y, una vez concluida, responderá a las necesidades del consumo de las más de 5 000 habitaciones que construirán en Paredón Grande, un islote de 8.7 kilómetros cuadrados donde se encuentran hermosas playas, ubicado al norte de Romano.
El ingeniero Michel Álvarez Tamayo, director de la Unidad Empresarial de Base Servicios Ingenieros Hidráulicos, de Ciego de Ávila, dijo que la primera parte, de 23 kilómetros de longitud, entre Coco y Romano, presta servicio a varias instalaciones, entre las que se encuentran una planta de tratamiento de residuales en ejecución, el batching plant y el centro de generación eléctrica de Romano.
La segunda etapa se extiende a lo largo de 8.5 kilómetros, hasta Paredón Grande, donde alistan las redes de alcantarillado y el sistema de fertirriego, este último de vital importancia en la reutilización del agua tratada para el beneficio de las áreas verdes en la planta hotelera.
En la construcción de la conductora, emplearon tubos de polietileno de alta densidad de 200, 315 y 400 milímetros de diámetro, fabricados en la empresa avileña Ciegoplast, entidad con gran protagonismo en obras similares en la mayoría de las provincias cubanas y el pedraplén Caibarién Cayo Santa María.
Todo eso está muy bien, pero no pierdan de vista la atención necesaria para los ductos de las zonas principalmente urbanas de Ciego de Ávila, donde hay salideros que llevan años, personas a quienes no les llega el agua, ciudadanos que están consumiendo agua con una calidad cuestionable porque por el mismo salidero donde sale el agua limpia cuando hay presión, se cuela el agua sucia hacia el interior de las tuberías y así por el estilo.
Yo soy consciente de la necesidad del turismo, pero me resulta un poco chocante que cuando se habla de turismo siempre parecen haber recursos y cierta agilidad, cosa que no parece ser así para otras.
Resulta un poco tentativo pensar que con una cantidad cercana a la mitad del costo de esa obra (digamos $3,000,000.00) más algo de lo que costarán las 5000 habitaciones a construir, se pudiera contribuir a corregir algunos problemas de tipo histórico.