Tu Youyou y el combate contra la malaria

youyou3Tomada de mujeresconciencia.comTu Youyou con el Premio Nobel en 2015En una conversación sobre etapas de nuestra juventud, mi esposo me contó que, estando en Angola, contrajo malaria o paludismo, una enfermedad potencialmente mortal transmitida a los humanos por algunos tipos de mosquitos, que produce fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, fatiga, confusión, convulsiones y dificultad para respirar.

Picada por la curiosidad, quise saber si existía cura para esta enfermedad y, gracias a varios libros y a Google encontré que la científica china Tu Youyou descubrió la artemisinina —un compuesto esencial— utilizado para crear drogas extremadamente efectivas para combatir la malaria.

De un esbozo biográfico extraigo que cuando era niña asistió a una de las principales escuelas privadas en la región donde nació, pero a los 15 años tuvo tuberculosis y no pudo estudiar durante dos años. Afortunadamente para la humanidad, esta enfermedad la inspiró para estudiar medicina y encontrar curas para enfermedades —como la que ella había padecido.

Comenzó a estudiar en la Escuela de Medicina de la Universidad de Pekín y, cuatro años después, Tu fue asignada para continuar sus investigaciones en la Academia de Medicina China Tradicional, donde estudió un curso a tiempo completo de medicina china tradicional.

A finales de la década de los sesenta, nuevas cepas de la malaria evolucionaron y se volvieron resistentes a los tratamientos con la cloroquina y la quinolina. La comunidad médica global luchó para responder a las nuevas cepas de malaria y la enfermedad se esparció rápidamente, provocando la muerte de millones de personas.

Sepan las amigas y amigos internautas que en el Sudeste de Asia el resurgimiento de la malaria fue particularmente catastrófico, por lo que controlar la enfermedad rápidamente se convirtió en la principal prioridad médica.

Como la parte inicial de la carrera de Tu se enfocaba en crear una cura para la esquistosiamiasis, una enfermedad causada por los gusanos platelmintos tropicales parasitarios, en 1967 fue contactada para unirse a un programa secreto del gobierno para descubrir drogas llamado Proyecto 523, el cual se concentraría en desarrollar una cura para la malaria.

Fuentes especializadas en la obra de la científica china mencionan que dos años después fue designada directora de su equipo de investigaciones y enviada a la región de Hainan para estudiar a los pacientes que habían sido infectados con malaria.

Después de que científicos de todo el mundo analizaran más de ¡240 000! compuestos sin éxito, Tu pensó que sería útil evaluar las hierbas chinas. Su equipo había evaluado nada más y nada menos que más de ¡2000! recetas chinas tradicionales y nada… hasta que encontraron una en la que utilizaban como ingrediente la planta de ajenjo dulce para tratar las fiebres intermitentes —un síntoma característico de la malaria.

Sepan, amigas y amigos de la Gran Red de Redes, que, en un principio, la planta de ajenjo demostró ser un tratamiento ineficaz contra la malaria. Sin embargo, Tu encontró otro libro, escrito en el año 340 d.C. por Ge Hong, y se dio cuenta que en lugar de hervir la planta de ajenjo dulce para extraer sus propiedades antimalariales, debería en cambio intentar realizar una extracción a una temperatura baja. Las primeras pruebas en ratones y monos demostraron ser ¡100 por ciento efectivas!, así como zumba y suena.

Logró extraer la sustancia antimalarial pura de la planta de ajenjo dulce y la llamó ‘qinghaosu’ o artemisinina —como se la conoce comúnmente en Occidente—. Insistió en que ella debía ser la primera en realizar una prueba de su descubrimiento en un ser humano y lo hizo en 21 pacientes.

Agreguen a su acervo que la artemisinina demostró ser completamente eficaz para tratar la malaria en estos pacientes. Ella —anónimamente— publicó su descubrimiento en 1977 y el uso de la artemisinina en las drogas antimalariales fue rápidamente adoptado alrededor del mundo.

Sus resultados le valieron la promoción a investigadora, en 1980, y un año después presentó sus descubrimientos de la artemisinina en una reunión de la Organización Mundial de la Salud. Continúa trabajando como la científica titular en la Academia de Medicina China Tradicional, desde 1955.

Ha sido condecorada a lo largo de su vida, con numerosos premios: recibió el Premio Lasker en medicina clínica en 2011. En 2015, fue una de las tres personas en ganarse el Premio Nobel de Medicina y Fisiología. Obtuvo el primer Premio Nobel en fisiología o medicina de China y fue la primera mujer china en recibir un Premio Nobel en cualquier categoría.

Curiosidades

• “La verdadera belleza de la música es que conecta gente. Lleva un mensaje y nosotros, los músicos, somos los mensajeros”, sentencia de una veracidad indiscutible rubricada por el cantante, vibrafonista y compositor estadounidense de jazz, Roy Ayers (1940).

• Sepan las amigas y amigos que gustan de estas breves cápsulas que las hormigas pueden llegar a estar ¡dos semanas! debajo del agua sin morir, así como zumba y suena, aunque habitan bajo tierra y generalmente se desplazan por encima de ella bordeando charcos y agua en general.

• Es muy probable que conozcan que las jirafas son los mamíferos más altos del mundo, tienen largos cuellos y altísimas patas que superan en altura a muchos humanos, pues miden aproximadamente ¡1,80 metros! Pero, además, pueden correr a una velocidad de hasta 56 kilómetros por hora en distancias cortas —más rápidas que Usain Bolt.

• Agreguen a sus conocimientos sobre la disciplina deportiva de nado sincronizado que la interpretación es fundamental. Los jueces pueden penalizar a las nadadoras si lucen un aspecto cansado o si no sonríen durante la ejecución de los ejercicios.

• “Una persona inteligente no es la que más sabe, sino la que más ve soluciones de problemas; la inteligencia es la capacidad de solucionar problemas”, sentenció Rodolfo Llinás (1934) médico, neurofisiólogo y profesor colombiano-estadounidense, de reconocida trayectoria por sus aportes al campo de la neurociencia.


Escribir un comentario


Código de seguridad
Refrescar