A veces, desde afuera las situaciones pueden verse menos problemáticas. No obstante, en el interior de las más complejas circunstancias puede verse la luz, aunque necesitemos de otros ojos para descubrirla.
Invasor visitó varios centros de aislamiento, laboratorios, hogares maternos, entre otras instituciones de la Salud Pública en Ciego de Ávila en busca de esa luz y con el lente de la cámara bien “afilado”, allí, nuestro fotógrafo apretó el obturador y captó la esencia de quienes viven este tiempo de pandemia aislados.
El fotorreportero se convirtió en uno de los de adentro para dejarnos ver a los de afuera lo que, como es obvio, no podemos apreciar tan fácilmente. Hombres y mujeres entregándose al cuidado de los posibles contagiados con el virus, en instantáneas tan reales como la situación que vive el mundo a causa del nuevo coronavirus.
Y, aunque los veamos con los nasobucos bien puestos, los de este lado esperamos ansiosos el día en que podamos ver sus rostros a plenitud y saldar las deudas por lo que hicieron mientras estaban adentro.
Existen hombres irreconocibles trabajando por la salud
La desinfección de todo el personal es una de las normas en esos espacios
Cada rincón ha de estar pulcro
El calor de la plancha elimina de los billetes todo rastro del virus
Manos jóvenes se encargan de alimentar a los pacientes
Atención especial reciben las embarazadas avileñas
Para evitar posibles contagios, indispensable el Prevengho-Vir
En los laboratorios de la provincia comienza la trayectoria de las muestras a estudiar
Bajo un microscopio las situaciones se vuelven más nítidas
De los paramédicos depende, también, la vida
Los aplausos son para ustedes