Las mismas razones que en contiendas anteriores han puesto contra la pared al cumplimiento del plan de azúcar en la provincia de Ciego de Ávila vuelven a devenir piedra donde tropieza el pie de la actual zafra.
Después de un buen despegue, en el que los cuatro centrales del territorio lograron insertarse en la llamada zafra chica (antes de cerrar diciembre) y de un mes de enero que no pintaba mal, llegaron las primeras lluvias, en febrero, para empezar a torcer cortes, tiro y molida, en contubernio con un balance de recursos no a la altura esperada y rendimientos cañeros también por debajo de lo previsto, además del ingrediente organizativo, que nunca falta y siempre incide.
Tan así fue que febrero 28 inscribió caída en estimados, razón por la cual, como explica el ingeniero Eduardo Larrosa Vázquez, director general de la Empresa Azucarera Ciego de Ávila, hubo que incrementar área. O sea, fue preciso destinar a industria áreas inicialmente no programadas, como alternativa para seguir aferrados a la idea de cumplir el plan de producción de azúcar.
Por suerte, caña había en ese instante y hay todavía, para no renunciar a tal propósito, al menos, mientras el tiempo (lluvia) y el espacio (plantaciones, equipos de corte y tiro, e industria) lo permitan, según opina el propio Larrosa.
Que la caña llegue fresca y limpia a los tres centrales
Dos recientes decisiones tienen que ver de forma directa con esa estrategia. En primer lugar, la paralización del central Ciro Redondo. ¿Y con qué objetivo? —se preguntarán algunos lectores—. Quienes tienen a su cargo los destinos de esta contienda consideran que así pueden ser reforzados los otros tres ingenios, a cuyos respectivos planes se añade, en equilibrada proporción, el volumen de crudo que deja pendiente el Ciro. Ven, además, como ventaja que, al salir de actividad, esa industria puede concentrarse más en la construcción de las obras asociadas a la bioeléctrica.
La otra determinación, con óptica de país, tiene que ver con el procesamiento de gramínea procedente de la vecina provincia de Camagüey. Quienes no somos especialistas o no dominamos cálculos y estadísticas de factibilidad, debemos suponer que, al final, los ingresos por concepto de producción estén por encima de los gastos que genera ese trasiego a considerable distancia y que, por demás, no se realiza por vez primera.
Disponer de suficiente caña es la primera condición para que Primero de Enero (el que mejor está moliendo), Enrique Varona y Ecuador procesen por encima del 65 por ciento de su capacidad: rango que está pidiendo la nación en medio de los contratiempos que signan a la presente contienda.
Y que en la industria todo el mundo sepa que cada segundo es azúcarDe lograrse tal empeño, y con la mirada siempre en el cumplimiento del plan, los azucareros avileños estarían con las botas puestas durante todo abril, para cerrar el mes con unas 28 000 toneladas más de azúcar y colgar guantes a mediados de mayo, no sin antes haber producido las, aproximadamente, 15 000 restantes, borrar todo atraso y coronar zafra con dulce broche.
Ojo con la industria. No basta con la existencia de caña, con el eficiente desempeño de los eslabones que les siguen a las cuchillas de las combinadas, ni tampoco con un favorable estado de ánimo en los hombres y mujeres que sudan rostro y camisa. La industria tiene que responder, mejor, incluso, que como ha venido haciéndolo hasta ahora, si se tiene en cuenta que la provincia registra un 16 por ciento de tiempo industrial perdido, o lo que es igual: dos puntos por encima de lo nacionalmente indicado o aconsejable.
Y ojo con algo que le comentó recientemente a Invasor Federico Pérez Quiala, dirigente sindical en Ciro Redondo: la nociva tendencia al éxodo de trabajadores hacia otros sectores, en busca de mejor remuneración.
El reto, en fin, no es cómodo. Los tres ingenios están obligados a responder bien, con un rendimiento industrial que no puede darse el lujo de comportarse por debajo de 10. Solo que ningún central funciona o trabaja por sí solo. Son hombres y mujeres quienes se encargan de dirigirlo y de hacerlo andar, con los recursos de que se disponga a mano, es cierto, pero a ellos corresponde hacerlo, y del mejor modo posible. De lo contrario, podría ocurrir que haya caña, pero siga faltando azúcar.
No entendí porqué Ciro Redondo no muele ...No comprendo nada .
La zafra lleva algunos recursos que deben estar antes de su arranque y la siembra al día , con su trtamiento cultural de todo el año .
Por favor la caña leva tecnificación de riego y se crece en rendimiento y no en áreas , eso está demostrado por la ciencioa y la experiencia hace muchos años ....y hagan los análisis y vean los que tiene buen riego los resultados por hectárea tiene ....En la agricultura cañera y no cañera lleva inversiones , sino seguiremos sacarles al Olmo Peras .
Lo otro hay que revisar , quien dirige la agricultura cañera , deben ser personas que conozcan de caña , riego , transporte y economía , los políticos para la política , no en estos temas , ese es mi criterio y ha sido y es un mal de fondo que debe superarse para poder encaminar kla economía cubana ,,,sino seguiremos en el mismo lugar , con atrasos abismales en la calidad de vida del pueblo y el éxodo de de cubanos , buscando mejoras económicas ...Hablar bien preciso , así lo necesita la economía y más la cañera .El éxodo de trabajadores del área cañera , es un problema de políticas publicas inadecuadas .
Tengo confianza que se cumpla todavía , pero sin Ciro , que es el coloso ....
Buen trabajo Pastor .
Prof Ernesto René Salcedo R .
No me queda claro el porqué parar Ciro Redondo. En el texto se explica que el objetivo es potenciar los 3 centrales restantes, pero no comparto ese criterio.
Otra cosa con la que no estoy muy solidarizado es la razón de molienda en Ciego de Ávila, de caña que está ubicada en Camagüey. Respetuosamente considero que lo que se haga de azúcar, se va a gastar en combustible y piezas de repuesto.
Yo creo que lo que hay que hacer es mejorar la calidad de la caña que se muele, buscando que moliendo menos caña, se logre más azúcar... y esto se enlaza con otro tema no menos importante y que en apariencias no parece tener relación: los salideros de agua.
Si en lugar de botar el agua como hoy se hace, se destinara a atender los campos de caña, se podría obtener caña de mejor calidad.
recuerdo los años 96 -97.la provincia si cumplia la zafra se ganaba el acto por el 26, el plan era de 540 000 , lo rebajaron a 510 000, se molio hasta los retoños y la caña para el ganado,resultado, no se cumplio y los años posteriores fueron muy malos.
hay que cumplir con Eficiencia y preferentemente con la caña de la provincia.
brmh
-una de las cosas fue que segun un estudio de los Especialistas los precios serian tan bajos en 100 años que ya no seria rentable
- que las mejores tierras se dejarian para la caña y asi aumentaria la productividad.
-que se realizarian en las tierras que sobraban otras empresas para diversificar la producion agricola y ganadera.
y puedo ser rotundo hasta la fecha se ha demostrado que nada se ha cumplido con buenos resultados.
brmh
Clase estudio habrá sido Bárbaro.
Lo cierto es que al año siguiente del desmantelamiento de los ingenios, el precio del azúcar alcanzó la cifra más alta en los últimos 50 años.
Me queda claro que el común denominador es la mala planificación y la ineficiencia.
A esto se suman los problemas relacionados con la eficiencia y la eficacia en el trabajo.
Saludos.
Otro zafra que fracasa.