Cuando este sábado, a partir de las 12: 00 del día (hora de nuestro país), Cuba enfrente a Bulgaria, en la fase semifinal del III Campeonato Mundial de Balonmano masculino para Naciones Emergentes, que tiene por sede a Georgia, se estará no solo en presencia de un partido que ofrecerá el derecho de asistir a la gran final del venidero domingo, sino también estarán frente a frente dos de los mejores porteros de la lid.
Porque si bien el avileño Magnol Suárez Fis impresionó con su 40 por ciento de efectividad en la fase clasificatoria, también lo es que el búlgaro Ivaylo Kostov lo hizo para un meritorio 36, aunque debo aclarar que el mejor, en esos primeros cinco duelos, lo fue el georgiano Tsintsadze Zurab, quien logró un casi increíble 47,8.
Desde luego que los números pueden ser traicioneros si de medir vulnerabilidades de los cancerberos en el balonmano se trata. No olvidemos, por ejemplo, que los rivales que enfrentó el antillano son distintos a los del portero del país anfitrión y que, incluso, Magnol, ante la India, escuadra más débil de su grupo, apenas jugó unos minutos.
Es por eso que los especialistas lo piensan dos veces para señalar un favorito en el match Cuba-Bulgaria. Los nuestros fueron primeros en su llave y los del país balcánico tuvieron que conformarse con el segundo puesto pues fueron superados por Georgia con holgada pizarra de 35-19.
Los nuestros han mostrado buena ofensiva y son liderados por Omar Toledano quien archivó 30 dianas en la clasificatoria, aunque Adonis Jesús García también es una “amenaza”, pues perforó en 22 ocasiones las porterías rivales.