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Dachel Duquesne es de esos a los que la vida le dio el don de semejar siempre estar tranquilo. Así estuvo este jueves en el box de Los Tigres, como si no existiera el público del estadio José Ramón Cepero.

Para el hockey sobre césped, y para la luchadora Yudaris Sánchez, fueron los máximos honores en la selección de los más destacados de 2018 en Ciego de Ávila.

Si le pusiéramos algo musical, o poético, a la derrota de este miércoles de los avileños ante Los Leñadores, pudiéramos decir que la posible sonrisa se le perdió "como el agua entre los dedos".

Sería de "osados" el pronosticar los dos equipos que se quedarán fuera de los play off en la LVIII Serie Nacional de Béisbol. Desde el inicio de la lid se vislumbraba que la nivelación de fuerzas iba a prevalecer.

En un lunes dedicado a tratar de completar barridas en la LVIII Serie Nacional de Béisbol, solo Ciego de Ávila no pudo lograrla, toda vez que cayó por la vía de los nueve ceros (8x0) ante Sancti Spíritus.

Es como si esta película, de repente, se pusiera al revés. Resulta que ahora son los rezagados los que ganan y, en la actual subserie, amenazan con barrer.

Ciego de Ávila apabulló este sábado a Sancti Spíritus, 11x3, en el estadio José Antonio Huelga, y sumó así su segundo éxito consecutivo en la LVIII Serie Nacional de Béisbol.

Dos profesores representarán a Ciego de Ávila, del 3 al 7 de diciembre, en sendos certámenes nacionales de Actividad Física Comunitaria (AFC), que tendrán como sede a la provincia de Camagüey.

No digo que todo ahora sea "coser y cantar" para los de Roger Machado, pero si, a falta de 18 juegos el "número mágico" para los avileños es 14, es evidente que no la tiene tan difícil.

Para el 19 de enero se anuncia la apertura de la Liga Cubana de Fútbol, oportunidad en que Ciego de Ávila, como visitante, enfrentará a la escuadra de Sancti Spíritus.

Tenía que ser Yander Guevara, porque, desde que apareció en el universo beisbolero de Ciego de Ávila, demostró que es de los que empina el pecho en los momentos cruciales.

Cuando un ajedrecista llega a una posición de zugzwang, significa, en buen cubano, que no lo salva ni el médico chino, o sea, que todas sus jugadas conducen a la derrota.