Dolores se mitigan con la vitalidad de un servicio de Salud Pública de inagotables recursos humanos en Ciro Redondo que está en 26
La pinense Margarita Luisa S. Pérez se encuentra más aliviada del dolor por una bursitis en el hombro derecho. “La verdad es que en esta sesión número 22 me siento como si me faltara poco para recuperarme”.
Su coterránea, Mereci Toledo Ferrer, ama de casa aquejada de artrosis y tendinitis, comenta acerca de lo que ambas tienen puntos de vista coincidentes: “Aquí el buen trato cura”, se refiere a la atención por parte del personal de la Sala de Fisioterapia, aledaña al policlínico Raúl Ortiz Ávila, del municipio avileño de Ciro Redondo.
Llegan más pacientes al departamento de electroterapia. Margarita Luisa insiste que le falta por decir una cuestión muy importante: “Yo estuve inválida durante un año por contracción del nervio ciático, luego tuve una crisis de la columna vertebral y aquí fui rehabilitada”.
Innovar también sana
Otros se incorporan. “Mire, este compañero es asistido por tener afectado el codo, las fracturas de muñeca también figuran entre los padecimientos comunes, junto con la cervicalgia”, opina Leandro Gómez Rojas, licenciado en fisioterapia.
¿Disponibilidad de recursos y estado técnico de los equipos?
“Hoy nos falta el gel para reanimar la realización de ultrasonidos; el láser con cierta dificultad, pero funciona el aparato; aunque escasean las almohadillas para cubrir los electrodos que le facilitan a las personas el tratamiento con corriente, Yurelys Torrecilla Díaz, compañera nuestra de trabajo, confeccionó unas similares y están dando muy buenos resultados.
“Si llegara equipamiento nuevo sería bienvenido, ahora guapeamos con lo que tenemos porque aquí también gestionamos la innovación para mantener de alta la técnica que tiene más de 15 años de explotación desde la inauguración de la clínica”, afirma Leandro.
La consagración deviene vitalidad
En el gimnasio, Yanicel Sablón Domínguez, responsable administrativa de la institución, destaca que “nuestra principal fortaleza es el colectivo laboral por su calidad humana y experiencia profesional, nos falta un fisiatra de forma permanente, pues Boris, el especialista con que contamos, viene a brindar el servicio desde el municipio de Morón.
“El gran problema en la actualidad es la interrupción por déficit de energía eléctrica, no obstante, creamos condiciones para ajustar los horarios. Aunque, sí se le dificulta el tratamiento a quienes vienen de zonas rurales. Ayer, por ejemplo, llegaron personas del campo al amanecer y se fueron, la corriente la pusieron después del mediodía”.
El gimnasio brinda mayores posibilidades por no depender de energía eléctrica
Argumenta que en salas de televisión de las comunidades rurales Los Naranjos, El Cedro y El Damují, aprovechan el local para brindar atención con bombillos infra rojos, la camilla para ejercicios y masajes, poleas y otros aditamentos propicios para la rehabilitación, lo cual ha posibilitado atender entre esos espacios comunitarios y la clínica municipal, a más de 7 588 personas en el presente año, cifra superior a igual etapa de 2024.
“Nuestras prestaciones suplen varios medicamentos, máxime ahora en tiempos de contingencias, he ahí la necesidad de mantener la vitalidad del equipamiento para ultrasonido, electroterapia, calores y otros que dependen de electricidad y siempre han tenido un alto nivel de satisfacción de la población”, enfatiza Edismel Montesino de la Rosa, jefe del servicio de rehabilitación en Ciro Redondo.
Solución en el puesto de trabajo ante el déficit de almohadillas originales para cubrir los electrodos durante la aplicación de la electroterapia
Visto y comprobado el palpitar un día escogido al zar, sin previo aviso, dolencias en el “corazón” tiene la sala de fisioterapia en Pina, la cual requiere un trasplante (llámese grupo electrógeno o planta asignada o mediante donación)
Tal vez no pueda materializarse la inversión a corto plazo en el contexto de las actividades por haber ganado Ciro Redondo la emulación provincial Ciego en 26; quizás pueda tenerse en cuenta la adquisición del equipo por ser esta actividad rehabilitadora una batalla estratégica por la vida.
Mientras tanto, los fisioterapeutas pinenses mantienen firme su compromiso de administrar cual dosis de excelente relación interpersonal con el paciente como el mejor calmante.