Entre pulpas y encurtidos, una fábrica se resiste a morir
La fábrica tiene más de 80 años y, de puro milagro, sigue en funcionamiento. El tiempo, que no perdona a nadie ni a nada, muerde con enfado las viejas maquinarias, las avería y, muchas veces, deja en total obsolescencia tecnológica algunas de sus piezas.
 
						
												
						










