Los 66 restaurantes que funcionan en Ciego de Ávila trabajan al 50 por ciento de su capacidad, al distanciar las mesas del salón a dos metros con el objetivo de evitar el contacto entre los usuarios y, siempre que sea posible, sentarán solo a dos personas por mesa.
El cumplimiento de esta medida forma parte de las orientadas por la máxima dirección del país para prevenir la expansión de la COVID-19, precisó a la Agencia Cubana de Noticias Pedro González Alfonso, director de Gastronomía en el Grupo Empresarial de Comercio provincial.
•COVID-19: Distancias que salvan vidas.
González Alfonso explicó que en todas esas instalaciones se continúa con el proceso de elaboración de comidas, no solo para quienes deseen degustarlas en el lugar, sino también para llevarlas a los hogares, por lo que cuentan con garantía de envases (cajitas de cartón).
Señaló, además, que con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, la dirección de los Trabajadores Sociales y con los familiares o vecinos de los 1 280 avileños beneficiados con el Sistema de Atención a la Familia (SAF) puntualizan las vías para que el almuerzo y la comida le llegue a cada uno de ellos, teniendo en cuenta que la mayoría son ancianos, sector poblacional vulnerable a la enfermedad.
Puntualizó el directivo que se extreman las medidas higiénico-sanitarias de los trabajadores que elaboran alimentos y para los que prestan los servicios directos a la población.
Todas nuestras unidades tienen disponibilidad de cloro diluido para el lavado de las manos, la limpieza y el fregado de insumos y cuentan con nasobucos, dijo.
María Luisa Ramos, quien está acogida a una de las 55 unidades que funcionan como Sistema de Atención a la Familia en Ciego de Ávila, dijo que, aunque le gusta ir a buscar los alimentos, sus hijos le prohibieron salir de casa debido a la pandemia.