La luz del Apóstol regresa cada 27 de enero, a la víspera de un aniversario más de su natalicio. El ideario martiano, como tantas antorchas en toda Cuba, tiene que seguir iluminando el presente y futuro.
A más de siete décadas de la primera marcha de las antorchas, cuando la Generación del Centenario bajó las escalinatas de la Universidad de La Habana y caminó hasta la Fragua Martiana, el Héroe Nacional continúa presente. Quizás debería estar más presente. Sin importar tanto cualquier fecha significativa. La evocación a Martí ha de ser constante e infinita.
La marcha y el desfile martiano apenas son un intento para que entre nosotros reencarne Martí. En homenaje a él son estas fotos de fuegos con frases suyas, a 172 años de aquel 28 de enero.
“Los hombres se dividen en dos bandos: los que aman y fundan, los que odian y deshacen”
“Las cosas buenas se deben hacer sin llamar al universo para que lo vea a uno pasar”
“Ser bueno es el único modo de ser dichoso. Ser culto es el único modo de ser libre”
“La prudencia puede refrenar, pero el fuego no sabe morir”
“La patria necesita sacrificios. Es ara y no pedestal. Se le sirve, pero no se la toma para servirse de ella”
“El primer deber de un hombre de estos días, es ser un hombre de su tiempo”
“Si hay algo sagrado en cuanto alumbra el Sol, son los intereses patrios”
“Los niños debían juntarse una vez por lo menos a la semana, para ver a quien podrían hacerle algún bien, todos juntos”
“Para los niños trabajamos, porque los niños son los que saben querer, porque los niños son la esperanza del mundo”