Una semana de violencia, exigencias de cumplimiento del Acuerdo de Paz, incremento de casos y muertes por la COVID-19 y el escandaloso caso del expresidente Álvaro Uribe, advierten una agudización de las diferencias en Colombia.
Durante los últimos días, varias masacres, fundamentalmente contra jóvenes y menores de edad, incitaron a buena parte de la población, políticos, organizaciones sociales y otros sectores, a repensar la situación en el país ante la indiferencia del gobierno en estos casos.
De tal manera, ayer viernes, cientos de jóvenes salieron a las calles de las principales ciudades del país para exigir a la administración de Iván Duque el cese de la violencia y el cumplimiento del Acuerdo Final de paz alcanzado en 2016, en La Habana, Cuba.
Cuba ??
— Piedad Córdoba ✊? (@piedadcordoba) August 20, 2020
- Pudo neutralizar el covid sin hacer cuarentena (0 muertos ayer)
- Tiene médicos ayudando en 15 países
- Producen sus respiradores
- Y ahora comenzaron pruebas de SU PROPIA VACUNA
Quien explica, ¿Cómo logra esto una isla bloqueada, empobrecida y embargada 63 años?
Tras las masacres cometidas, Naciones Unidas, así como Cuba y Noruega, garantes del proceso de paz, hicieron un llamado al gobierno de este país para que adopte medidas reforzadas que contribuyan a frenar el asesinato de excombatientes y líderes sociales.
Ante el complejo escenario de inseguridad, el partido Polo Democrático invitó a las formaciones políticas de la izquierda democrática, los partidos alternativos y progresistas, al movimiento social y popular, a la intelectualidad y personalidades democráticas a hacer realidad un histórico pacto nacional.
Estudio de la Universidad de Los Andes revela que los pobres en Bogotá son los más vulnerables a la #COVID19. La desigualdad y la inequidad otra vez en el centro de las causas.#21agosto #Cubahttps://t.co/RIkIezTCOu
— EmbajadaCubaColombia (@EmbacubaCol) August 21, 2020
La iniciativa propuesta por esta fuerza política procura lograr las grandes transformaciones de paz, democracia, equidad social y la búsqueda de fuentes energéticas distintas para contrarrestar el cambio climático que requiere hoy Colombia, explicó el senador Iván cepeda.
En este escenario, la prisión de Uribe, su renuncia al cargo de senador y las acusaciones en su contra, pusieron en jaque al gobierno de Duque que, sin embargo, sigue defendiéndolo y, por otra parte, acercándose al gobierno de Estados Unidos encabezado por Donald Trump.
Esta semana, el gobernante tuvo una reunión con Robert C. O'Brien, asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos; Craig Faller, jefe del Comando Sur; Mauricio Claver-Carone, asesor de Donald Trump, y el embajador de Washington en Bogota, Philip Goldberg.
Según Duque, en la cita de trabajo con la delegación estadounidense dialogaron sobre la pandemia de la COVID-19, la lucha contra el narcotráfico y el fortalecimiento del Compromiso por Colombia, un proyecto para reactivar la economía.
Al finalizar el encuentro en esta capital, ambas partas se felicitaron y saludaron por los supuestos éxitos del Plan Colombia y Duque mencionó otra nueva estrategia, o una segunda edición de dicho plan, para la lucha contra el narcotráfico que, según él, podría ser un modelo para la región.
"Como al que no quiere caldo se le dan dos tazas, ahora el gobierno anuncia Plan Colombia 2, cuyo propósito es el mismo del primero: intervenir militarmente áreas del conflicto para la fumigación aérea y erradicación forzosa de la coca. Poco o nada para la presencia social estatal", aseguró el expresidente Ernesto Samper.
•Vea: Llegan soldados de EE.UU. a Colombia bajo lluvia de críticas.