En El Placer no bajan las armas
Fotos: Magaly
El Placer y sus productos se imponen en la competencia, por responder a una agricultura sostenible, sobre bases agroecológicas
Después de varios kilómetros de recorrido, serpenteando los cráteres de una carretera que no ha recibido ningún mantenimiento durante años, y que deja el efecto de un reverbero en el motor del NIVA, la Comercializadora Agroindustrial El Placer, asociada a la Cooperativa de Crédito y Servicios (CCS) Reinaldo Maning, perteneciente al municipio de Majagua, se me asemeja a un oasis, que nos recibe casi al mediodía en una de las jornadas más calurosas de este año.
Pero no es precisamente por la brisa y el agua que nos refresca, sino porque allí, en medio de la campiña, hay un colectivo enfocado en la producción, dispuesto a sortear cualquier obstáculo y ocupado en la búsqueda de alternativas para no dejar perder cosechas y garantizar la satisfacción de clientes tan diversos como la población, el sector del turismo y varias empresas estatales.
Aquí estamos bajo las balas, asegura Ermis Gutiérrez Almaguer, especialista en Gestión Económica en la Comercializadora, y deja ver que en la batalla económica, están en primera línea y como en la guerra, bajo el fuego, no están dispuestos a retroceder, por el contrario, de las estrategias a seguir, depende seguir avanzando.
Ermis Gutierrez Almaguer cuantifica los resultados del centro de beneficio y de la minindustria
La entidad cuenta con dos centros de costo: una minindustria, que procesa frutas y vegetales de la propia CCS y zonas aledañas, y un centro de beneficio para las frutas y viandas que se envían a los destinos contratados.
Con un costo por peso de 0,76 y un salario medio de 12, 620.00, el colectivo de 72 trabajadores es muy estable y asume todo el quehacer productivo, aunque eventualmente se requiere emplear otras fuerzas para acometer determinados encargos.
El día de nuestra visita, por ejemplo, un grupo de mujeres de la zona estaban contratadas para escoger arroz cosechado por productores del área, el cual, después de beneficiado, podría venderse a mayor precio y aportar a los resultados económicos.
Hasta el cierre de mayo los ingresos por la venta de productos frescos y envíos del centro de beneficio ascendieron a 10, 921. 093 pesos por una producción de 78 056 kg, en la que sobresalen el boniato, la calabaza, malanga, tomate, pepino, acelga, fruta bomba, melón y maíz, entre otras viandas y hortalizas.
A su vez, la minindustria recaudó en igual etapa 8, 880. 397 pesos por la venta, bajo la marca comercial Son de la tierra, de jugos de frutas, encurtidos, pastas de ajo y cebolla, salsas picantes y agridulces, mermeladas y sazones en diferentes formatos.
Guardar el mango en tajadas para su posterior proceso evita pérdidas
Alrededor de 50 opciones llegan a la población a través de dos puntos para el comercio, uno en el propio Consejo Popular de Mamonal, donde está enclavada la minindustria, y el otro en la cabecera del municipio de Majagua, con precios competitivos, por debajo de lo que predomina hoy en el mercado.
A la entrada del local de trabajo, un mural expone al visitante la política que se sigue, basada en las norma ISO 90001/2015 para garantizar la inocuidad de los productos procesados y envasados.
Las muestras se llevan periódicamente al laboratorio para chequear la calidad, se controlan los peligros de contaminación y existe una atención a la salud y seguridad de los trabajadores, con el propósito de lograr un resultado en armonía con lo natural como sello distintivo.
Fuente de empleo y desarrollo
Zaida, Edilia y Mayelín están entre las trabajadoras más antiguas de la Comercializadora El Placer. Con gran destreza realizan, junto a una docena de hombres y mujeres más, el laqueado de mangos, con el propósito de almacenarlo en forma de tajadas en neveras, para cuando existan las condiciones, elaborar la pulpa y, sostener el pedido de clientes como la fábrica de helados Nestlé, instalaciones turísticas y entidades como las empresas Eléctrica y Servisa S.A, entre otras.
Sentadas alrededor de una mesa de metal responden las preguntas sin detener la parte del proceso que les corresponde, el cual comienza previamente con la selección y lavado de las frutas y concluye con el embalaje de las porciones en sacos bien sellados.
Las mujeres encuentran varias opciones de trabajo en la Comercializadora
Todas coinciden en reconocer la garantía de empleo, sobre todo para las féminas, que representa la entidad, por su situación geográfica en parajes donde no abundan otras alternativas que no sea el cultivo de la tierra.
El salario, sostienen, es un apoyo importante a la economía familiar y repercute en la estabilidad del personal y en su entrega y sentido de pertenencia.
De la mano de la ciencia y la innovación
Por todas partes se nota aquí el liderazgo de Martín Alonso Gómez (Martincito), al frente de El Placer y su empeño por aprovechar al máximo las potencialidades que ofrece la tierra para generar crecimiento económico, reducir los impactos en el medio ambiente y aplicar los principios de una economía circular.
Pero no todo es color rosa, ni marcha sobre ruedas el ciclo productivo. Hay que sortear dificultades, también comunes a otras ramas del país, y apelar a la ciencia y la innovación para encontrar soluciones sin menoscabo de la calidad.
Gutiérrez Almaguer refiere algunas de ella, como las limitaciones con el envase, por ejemplo el nylon que se usa en la elaboración de las bolsas escasea y hay que pagarlo a precios altos, lo que encarece el producto final. Por eso, en ocasiones, comercializan las salsas, pastas y encurtidos en formatos de diferentes tamaños y también en cubetas plásticas y en los planes está contar con una sopladora de pomos para no depender de fuentes externas.
Otro tanto ocurre con materias primas auxiliares para garantizar los procesos, pero ante ello se impone la iniciativa colectiva y la innovación.
El caso es no detener ninguna línea, afirma el especialista y ejemplifica que ante la falta de combustible, emplean leña y cocos secos para alimentar el fuego de la caldera, además, se ha incrementado la producción de la meladura de caña, que venden en bolsas de 1 kilogramo en el mercado y utilizan para endulzar los jugos de frutas de la minindustria.
Esta opción es muy aceptada por la población, en momentos en que escasea el grano en el país y su empleo como edulcorante ha sido bien recibido por los clientes.
El sector del turismo y la fábrica de helados Nestlé están entre los que adquieren la pulpa de frutas de la minindustria
A pesar de los inconvenientes que origina el mal estado de los viales de acceso para sacar las producciones terminadas o, para que lleguen a la Comercializadora interesados en contratar sus servicios, El Placer y sus productos se imponen en la competencia, por responder a una agricultura sostenible, sobre bases agroecológicas.
Allí hay un ejemplo de buenas prácticas para aprovechar todo lo que produce la tierra, tanto de forma fresca, como convertido en alimentos perdurables en conservas y, hay un colectivo dispuesto a no bajar las armas, por dura que sea la batalla.