Los 15 de La Chula

La repentista más joven de Ciego de Ávila cumplió 15 años y hubo guateque, controversia y mariachis, como debe ser

Toda la luz que le falta a Yudiannys Barrera Mujica en los ojos la tiene en el corazón y de ahí, como un rayo, a la mente, ágil y consonante…, o viceversa. Un día le preguntaremos cómo hilvana tan rápido los octosílabos y de dónde le viene ese don que ha ejercitado desde que era una niña.

No es que ahora, con 15 noviembres cumplidos, haya dejado de serlo, pero se le va notando otro semblante, porque esta muchachita luminosa, enfundada en guayaberas blanquísimas o en vestido de princesa, va a la batalla de las controversias, contra quien sea, con la misma seguridad de las más grandes improvisadoras cubanas.

Se lo demostró a Silvito Martínez hace un mes, en la Casa de la Décima Raúl Rondón. Sin perder la ecuanimidad, como quien va tejiendo en silencio respuestas electrizantes y una venganza poética después de un arduo intercambio  ─en el que él parecía condescendiente y ella sin dejarse ningunear, retadora─, le dijo:

Cámbiame la inteligencia,
Subiendo por mis paredes,
Que yo sé bien que no puedes,
Partir al medio a Florencia.
Tú no tienes experiencia
En los guateques más buenos.
Tus versos ya no están llenos,
De algún verso, ¿qué te digo?
Si tú no puedes conmigo,
Con Florencia mucho menos.

Y podríamos pensar que en la fiesta de sus 15, celebrada anoche en la sede del Comité Provincial de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, bailaría valses o se dejaría encantar por el mariachi y los improvisadores que le regalaron décimas de elogio. Pero de eso nada, volvió a desafiar con versos al mismísimo Armando Alfonso Padilla, ícono del repentismo avileño.

Liados en una controversia infinita, La Chula (que así le llaman quienes bien la quieren) y Alfonso Padilla rimaron con picardía y agilidad, unas veces más agudos, otras menos, y, sin embargo, lo que fue asentándose en la noche no fue tanto la porfía como la certeza de que la décima y el punto cubano tienen continuidad en Ciego de Ávila.

Una continuidad fomentada desde la Casa de la Décima y sus talleres, adonde fue a dar un día feliz Yudiannys para nunca más abandonarla. Esa misma casa y sus compañeros de aprendizaje y contienda poética estuvieron con ella celebrando los 15 más largos del mundo, porque el cumpleaños de La Chula fue en noviembre, pero ahora, poco más de un mes después, incluso las máximas autoridades de la provincia, fueron a felicitarla.