Anegados y pestilentes

Vecinos de la calle Icacos, entre Sexta y Séptima, en el reparto Díaz Pardo, de la capital provincial, reclaman una solución definitiva al salidero de aguas albañales que mantiene anegadas la vía y las áreas verdes del edificio Tres, haciendo imposibles el tránsito y el acceso al inmueble. El mal olor también está pasando factura a los moradores. (SAYLI)

Lo que queda por hacer

Sobre la indolencia de algunos choferes de carros estatales, al no recoger personas que se trasladan a sus puestos de trabajo en horarios de máxima congestión, versa la queja del lector majagüense Rafael Soto Ramos, publicada en esta sección el 11 de junio pasado. La Empresa Provincial de Transporte explica a Invasor que se mantienen funcionando 44 puntos de embarques y 5 alternativos, ubicados todos en los lugares de mayor concentración de pasajeros; que se tramitan las incidencias de los conductores que violan lo establecido con los directivos de las empresas incididas y se adoptan las respectivas medidas. Aclara que resulta imposible la colocación de un inspector popular de transporte en el nivel de Consejo Popular o de Barrio, no obstante, reconoce que queda mucho por hacer en materia de control de los medios y de la transportación pública de pasajeros. (ROBERTO CARLOS)

Hace aguas

En la calle Cuarta, entre Serafín Sánchez y Bembeta, añoran los tiempos en que a esta parte de la capital provincial llegaba el agua potable. Refiere Manuel Leyva Vázquez (Cuarta, No. 153) que desde hace cinco o seis meses carecen del líquido y, cuando fluye, arriba contaminado y maloliente. Directivos de Acueducto y Alcantarillado del municipio han prometido la distribución mediante pipas, pero la promesa hace aguas y la contaminación persiste. (CARVAJAL)