Sin Rodeos (12 de marzo de 2020)

Por la mayor equidad

Como “el nivel de productos de aseo que se distribuye en el municipio no satisface las demandas cada vez más crecientes de la población”, resulta imposible que dejen de expenderse de forma liberada y hacerlo mediante la Libreta de Abastecimientos, como lo había propuesto el lector Antonio Hernández, residente en Primero de Enero. Así lo explica Lubia Rodríguez Núñez, Coordinadora de Programas y Objetivos del Consejo de la Administración Municipal en ese territorio, quien precisa, además, que “para asegurar una distribución más estable y equitativa a la población”, la comercialización liberada se efectúa sobre la base de una unidad de detergente líquido, igual cantidad de crema dental, dos de jabón de lavar y hasta tres de jabón de tocador, a partir de la indicación enviada por la Ministra de Comercio Interior, el 23 de abril de 2019. (FILIBERTO)

¡Qué calor!

Ni siquiera en estos días más fresquitos se ha hecho más agradable entrar a la tienda Los Balcones, de Morón, puesto que la ausencia de ventilación natural se confabula con la rotura de los acondicionadores de aire para que hacer cola allí dentro suponga un reto añadido: el calor. (AMANDA)

Buen trato

Pedro Legón Ramos, vecino de Jagüeyal, tiene palabras de elogio por el trato que le dispensaron el pasado 29 de noviembre en el taller de enseres menores, unidad que pertenece a la Empresa de Servicios del Poder Popular en el municipio de Venezuela. Precisa que el administrador, la recepcionista y la almacenera supieron atenderlo en el trascurso de una hora y 15 minutos, tiempo que necesitaron para localizarlo en una lista de casos pendientes, “hacía más de dos años”, de una junta de refrigerador. Añade que “este es un colectivo ejemplar, los compañeros hacen lo posible por resolver cada problema, aun en las condiciones actuales, ante la falta de piezas y agregados”. (CARVAJAL).

A correr

Jasiel Rodríguez Díaz y su novia visitaron el restaurante La Romagnola el pasado domingo, con la esperanza de disfrutar de un servicio de excelencia. Después de permanecer en la puerta más de 10 minutos sin que nadie los recibiera, un trabajador les dijo que entraran, pero observaron que limpiaba las mesas con sus manos, los manteles estaban sucios y manchados y el piso también mostraba falta de higiene. Marcharse cuanto antes fue la solución. (FILIBERTO)