No es lógico que, mientras descienden los casos, se den violaciones de los protocolos
El título podría considerarse ambiguo, toda vez que las equivocaciones en salud cuestan caro y nunca son deseables, esperables ni aceptables… nunca. Pero en el contexto epidemiológico actual, a Ciego de Ávila le urge consolidar el descenso sostenido de la incidencia de casos positivos y fallecimientos por COVID-19, porque esta provincia no soportaría un nuevo rebrote, sobre todo desde el punto de vista emocional.
Se trabaja, claro que se trabaja. Sin embargo, hechos puntuales (y otros reiterados) desdicen el control y la observancia de protocolos a lo largo del sistema sanitario, al tiempo que ponen en peligro los resultados mostrados por el territorio en lo que va de mes, de manera global, pues algunos municipios todavía no logran un decrecimiento firme en sus estadísticas diarias y acumuladas.
Así, ha sucedido en esta misma semana que Lisandra López, una joven recuperada de la COVID-19, en la cabecera provincial, acudió al policlínico de su área de salud aquejada de dolor de garganta y le indicaron un test rápido, el cual resultó negativo. No obstante, fue aislada en el centro ubicado en la Universidad Máximo Gómez, donde le aseguraron que estaría junto a otros que, como ella, no eran positivos, a la espera de un PCR. La promesa no se cumplió y, en su tercer día de ingreso, sin un PCR confirmatorio, está compartiendo cuarto con personas que sí tienen COVID-19.
“No me miraron ni la garganta. Y ahora me siento mal por los efectos secundarios del Heberon y el Oseltamivir”, dice. Entonces, en el caso particular de esta muchacha, si no estaba infestada, tiene todas las papeletas para reinfestarse. ¿Cuántos están en similar situación? ¿Cambió el protocolo para los que son negativos a la prueba rápida? Mezclar pacientes es un error garrafal y eso está escrito en todos los manuales.
Que el entusiasmo por reajustar capacidades, ahora que los casos han disminuido, no nos lleve a desconocer lo que establecido está, pues si algo ha demostrado la pandemia es su “resiliencia”, o sea, su capacidad de recuperarse y volver con más fuerza.
Crucemos los dedos, claro, ¡solavaya por ahí para allá otro pico pandémico! Pero hagamos, primero, lo que debe ser hecho… y bien. Aprovechemos este “respiro” —siempre entre comillas, porque cada día se diagnostica más de un centenar de enfermos y se nos mueren tres, cuatro, cinco personas, como promedio— y acabemos de apretar las clavijas, para que los acordes del control no sean sordos.
El “respiro” se traduce en un descenso de 839 casos en esta quincena con respecto a la anterior, lo cual permite balances positivos entre los confirmados y las altas, toda vez que los fallecimientos también disminuyeron en 13, en igual período.
Así, 119 nuevos contagiados al cierre del 22 de septiembre es la cifra más baja desde el cuatro de julio, hace 81 días. La gravedad de ese lapso, el más letal y abrumador en casi 18 meses de pandemia, se manifiesta en dos estadísticas: se enfermaron 42 672 personas (el 87,6 por ciento del acumulado) y fallecieron 639 (90 por ciento del acumulado).
Es decir, a Ciego de Ávila le habría bastado apenas dos meses y medio del 2021 para sufrir en carne propia los estragos de la COVID-19 a una escala imprevisible y, sin embargo, tuvimos otros rebrotes que añadieron “combustible”. Cada uno peor que el anterior.
Y si los temores iniciales de los epidemiólogos, allá por abril y mayo de 2020, era que el contagio se “aplatanara” en Ciego de Ávila y Morón, territorios con mayor población, tal y como sucedió después, a partir de septiembre; lo cierto es que no estaremos a salvo hasta que el resto de los municipios corte la transmisión del SARS-CoV-2. Si hoy la tasa de incidencia acumulada provincial todavía sigue por encima de 800 por cada 100 000 habitantes se debe al reporte de siete municipios, según muestra la tabla proporcionada por el Doctor José Ramón Artigas, Metodólogo Docente del Centro provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología.
Otras estadísticas de la jornada
• Acumulado de casos autóctonos: 48 697
• Casos autóctonos del día: 119 (de ellos 24 menores de 18 años)
• Casos activos: 1 038
• Casos graves y críticos: 31 (27 graves, 4 críticos)
• Fallecidos del día: 4
• Acumulado de fallecidos: 710
• Tasa de Incidencia Acumulada (15 días): 801.7 por cada 100 000 habitantes
• Muestras procesadas: 2 156 (positividad del 5.5 por ciento)