El colectivo del central Enrique Varona, del municipio de Chambas, no abrirá capacidades moledoras en la campaña 2019-2020, a iniciarse el venidero noviembre, en esta provincia de Ciego de Ávila.
La decisión obedece a dificultades económicas que no permiten acometer las reparaciones de los cuatro ingenios que producen el oro dulce en el territorio avileño, algo que sucedió en las dos últimas campañas.
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Al dar a conocer está información, el ingeniero Eduardo Larrosa Vázquez, director general de la Empresa Azucarera Ciego de Ávila, precisó que tal limitación no posibilita adquirir los recursos necesarios para poner a punto a los cuatro ingenios del patio.
Agregó que la materia prima con que cuenta la provincia avileña puede ser asumida por los otros tres colectivos, o sea, las plantas moledoras de Primero de Enero, Ciro Redondo y Ecuador.
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Larrosa Vázquez explicó a Invasor que se trabaja en aras de afectar lo menos posible a la fuerza laboral del ingenio chambero, mediante la aplicación de una variada gama de acciones. Dijo que al interior de la planta quedará un grupo de unos 80-85 obreros quienes se ocuparán de la limpieza, cuidado y preservación de todos los equipos.
Han previsto que ante la falta de algún personal preparado para realizar labores en las reparaciones, se aprovechará la experiencia de esos obreros con determinada especialización.
“Les estamos buscando la oportunidad de trabajo a partir del fortalecimiento de los bateyes azucareros, prácticamente a todos. Así, puedeN conformarse brigadas de construcción para acelerar la edificación de viviendas, lo que va a generar los propios ingresos de ese personal.
“También hemos pensado en el aprovechamiento de las instalaciones del laboratorio, paraN en coordinación con los organismos del territorio, elaborar allí medicamentos a partir de la medicina verde y tradicional, lo que sería beneficioso para quienes viven en ese entorno.
“Además, avizoramos muchas posibilidades en el taller de maquinado, lo que dará múltiples soluciones a problemas inherentes a la comunidad y a otros organismos y entidades; y en la posible integración de otros a las bases productivas, sobre todo con vistas a impulsar el desarrollo de las plantaciones cañeras y la siembra de la gramínea.”
Informó que quienes laboren en diferentes ocupaciones lo harán bajo contratos indeterminados cíclicos, o sea, que nadie perderá su plaza, a la que podrán retornar cuando se decida que el Enrique Varona vuelva a moler.