No hay dudas, los resultados de los Tigres en su gira por el occidente, en donde en diez salidas solo consiguieron tres victorias, no puede tener otro calificativo que deficiente, pero hay que tener cierta mesura y también profundidad en la evaluación.
Claro que es preocupante el actual momento por el que atraviesa el equipo, pero vuelvo a lo mismo: ¿Cuántos “superespecialistas” en el tema auguraron que el equipo luego de más de un tercio de calendario de la 63 Serie Nacional de Béisbol, estuviera en el segundo puesto, con balance de 18 éxitos y nueve fracasos?
Por eso hoy mismo, cuando caminaba por el céntrico bulevar avileño, a las preguntas de ¿qué te parece la actuación de los Tigres —en clara alusión a sus recientes fracasos—, no dudé en responder que vienen cumpliendo, hasta el momento, una labor digna de aplausos.
¿Porque qué otro calificativo emplear para un equipo que en los análisis de pre competencia se dijo tendría que jugar muy pero muy bien para clasificar y ahora esté en el segundo peldaño? No hay dudas, la tendencia en nuestro pasatiempo nacional es ser muy exagerado con elogios cuando se gana o ser super injustos en las derrotas.
Pero si de analizar objetivamente este descalabro de los últimos diez partidos se trata, sí es preocupante que la defensa, de ser la primera antes de tomar carretera, ahora regrese al estadio José Ramón Cepero siendo una de las últimas.
Esas siete marfiladas en el duelo del pasado domingo deben servir para encender las alarmas del cuerpo técnico. Ya he dicho que los errores no solo cuestan carreras, sino que influyen más de lo que se piensa, en el aspecto sicológico de los lanzadores y del colectivo, en sentido general.
Pero el pitcheo también emprendió esta gira siendo el primero y ya ocupa el cuarto lugar (4,42 carreras limpias por juego), mientras que la ofensiva, que llegó a estar en 339, ahora muestra un 309 con el que marcha en la sexta posición.
Es decir, los siete fracasos tienen sus motivos bien localizados. No se puede aspirar a más cuando todos los factores de juego no responden.
Claro que, en medio de tantas penurias, siempre hay detalles positivos, como lo son los buenos momentos ofensivos que viven Héctor Labrada (416) y Fernando de La Paz (380) o el buen trabajo monticular del jovencito Ediel Ponce.
Ahora, en el Cepero, la tropa de Dany Miranda tendrá a partir de este martes de rival nada menos que al actual campeón Las Tunas, que ha ganado ocho de sus últimos diez compromisos. Será este un buen medidor para ver de qué estirpe están hechos estos Tigres.
🐯 ¡ TIGRES vs LEÑADORES ! 🌵 Continúa la etapa regular de la 63 Serie Nacional de Béisbol y los Tigres de Ciego de Ávila...
Posted by Tigres Avileños on Monday, April 15, 2024