Artesanos artistas desarrollan sus asambleas y pujan por mejores condiciones para la creación
Las celebraciones por el aniversario 30 de la fundación de la filial avileña de la Asociación Cubana de Artesanos y Artistas (ACAA), el próximo 18 de marzo, los podría haber sorprendido con una sede recién inaugurada, pero ese es un sueño que ya no será.
Sin embargo, los artesanos artistas de Ciego de Ávila no se han quedado de brazos cruzados e intentan revitalizar el rol de la organización, a partir de un amplio programa de actividades y con el curso natural de un proceso asambleario que deberá culminar con la renovación del ejecutivo actual, el mismo que, en los últimos ocho años, ha aglutinado y conducido a nuestros creadores.
Según Roberto Ávila, vicepresidente primero de la ACAA en el territorio, entre las acciones principales estará un encuentro con fundadores y una exposición colectiva, que reunirá las mejores obras de los últimos 30 años. “Será una mirada retrospectiva a la producción de artesanía artística en la provincia”, enfatizó.
Además, la superación tendrá un rol fundamental, pues se impartirán siete cursos o talleres para elevar las competencias de los miembros, con énfasis en la técnica del deshilado, la composición escultórica, la alfarería, el papier maché y el trabajo en piel.
En la mañana de este 23 de diciembre quedó inaugurado el XXII Salón Provincial de Artesanía "Eduardo Martínez"...
Posted by Galería "Raúl Martínez" de Ciego de Ávila. on Friday, December 23, 2022
Hablamos de 174 miembros distribuidos en las manifestaciones de piel, metales-vidrio, talla, cerámica, papier maché, textil y misceláneas, que han tenido que reinventarse en un contexto difícil con tal de mantener un stock de piezas y una presencia más o menos estable en el mercado, fin último de la mayoría de las obras producidas aquí.
Tallar mango en vez de caoba y cocer las piezas en hornos que no son los ideales se suman a una lista de inconvenientes, coronados por la ausencia de una sede permanente. Si lo que está en discusión es la motivación para crear o la participación en los salones por aquí inicia la punta de la madeja.
El otro extremo descansa en los efectos negativos de no contar en la ciudad cabecera con una feria artesanal, y desconocer la labor promocional y de trabajo comunitario que podría desarrollarse desde ahí. No menos importante sería, por ejemplo, que el proyecto Manos Mágicas, uno de los que se potencia en Cuba desde el Centro de Intercambio y Referencia Iniciativa Comunitaria (CIERIC) por su impacto en el rescate de tradiciones y a favor del empoderamiento femenino, pudiese encontrar cobijo bajo ese techo después de tanto bregar y esperar.
En 2019 Invasor se acercó al tema, cuando el local ubicado en la calle Maceo, entre Joaquín de Agüero y Carretera Central, entró en un proceso constructivo que parecía finito. Entonces, hablamos de una inversión de miles de pesos, a los que la membresía había sumado sus contribuciones (40 000 pesos en moneda nacional y 1000 CUC). Los planes no se concretaron en los plazos previstos y la deuda sigue pesando, a pesar de la voluntad gubernamental de transformar el espacio.
• Lea lo que Invasor publicó en 2019 sobre el tema
Por más que la artesanía artística no reciba toda la promoción que debiera en los circuitos del arte o, incluso, falten aproximaciones críticas coherentes con sus valores, hay muchísima tradición e historia acendrada hasta en las piezas más simples. A veces, pertenecer a esta organización es la puerta de entrada a proyectos más ambiciosos, donde lo artístico y lo utilitario convergen en armonía.
Basta pensar en grupos de creación como Pauyet, Guayza o Justo a la moda para cerciorarnos de que los esfuerzos valen la pena y que a los artesanos artistas hay que darles lo que merecen. Lo que viene después es imposible saberlo, pero ahora necesitan una sede renovada para que las celebraciones tengan techo seguro.