La gestión de un amplio plan de eventos como la Feria Provincial del Libro y las ferias municipales, el premio nacional Eliseo Diego y la Celebración del Día del Libro Cubano, fueron algunos de los resultados al cierre del 2022, evaluados y analizados en la asamblea de balance del Centro Provincial del Libro y la Literatura (CPLL) de Ciego de Ávila.
Inicia Asamblea de Balance del Centro Provincial del Libro y la Literatura en Ciego de Ávila para analizar y evaluar los...
Posted by Ediciones Ávila on Friday, February 3, 2023
El informe, presentado por Yanelis Santos Nieves, directora del CPLL, y Natacha Cabrera, al frente de Ediciones Ávila y el Centro de Promoción Literaria (CPL) “Raúl Doblado del Rosario”, listó otras acciones del período como el Festival del Libro en la Montaña (en los municipios de Florencia y Chambas), el Festival del Libro y sus colores, las ferias de verano y el Aniversario 22 del Sistema de Ediciones Territoriales, entre otros.
Asimismo, ponderó la colaboración con otras instituciones como la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) —en Las Aguas Mil— y la Asociación Hermanos Saíz (AHS) —Gira de Poetas y Trovadores Estrofa Nueva, Cruzada Cultural, La Llave Pública, Premio Poesía de Primavera y Trovándote.
Otro punto a aplaudir, en medio de la situación económica actual, es que se hayan mantenido los espacios fijos, peñas literarias e infantiles, y los ateneos de las librerías La Moderna Poesía, en Morón, y Juan Antonio Márquez, en Ciego de Ávila.
Precisamente sobre la librería moronense se informó que fue seleccionada por el Instituto Cubano del Libro como Referencia Nacional y durante la Feria Internacional del Libro de La Habana (FILH) 2023 se le otorgará la condición de Mejor Librería del País, por segunda vez, ya que en la de 2022 también había logrado ese mérito.
En la reunión de trabajo se dio a conocer que en la FILH se realizará un homenaje al escritor, promotor y librero avileño, recientemente fallecido, Arlen Regueiro Mas.
Aun cuando el panorama del libro cubano se mostró complejo en el período, Ediciones Ávila ha ido sacando a la luz sus planes editoriales, y el de 2022 se encuentra en proceso de arte final e impresión con vistas a la FILH 2023.
Además, en franca disposición para adecuarse a la realidad del sistema editorial cubano, y a tono con las tendencias internacionales del mercado del libro, la casa editorial produjo 20 libros digitales y 3 audiolibros.
Igualmente, el trabajo en redes sociales de Internet se ha afianzado. Ediciones Ávila tiene perfiles en Facebook, Telegram e Instagram y el CPLL en Twitter y Telegram, donde también tiene un canal la revista digital Heliógrafo, la que cuenta, en adición, con un blog del mismo nombre en la plataforma Medium.
Con la Feria Universitaria del Libro y la Literatura, el evento Leer la historia, y el Festival del Libro y la Familia, el CPLL hizo su valioso aporte a las jornadas de Esfuerzo Decisivo en saludo al 64 aniversario del triunfo de la Revolución cubana.
El programa literario de 2022 se cumplió en un 100 por ciento, según expuso el informe de balance, incluyendo las programaciones extra, en colaboración con la Unión de Historiadores de Cuba, la AHS, y la Sociedad Cultural José Martí.
Mientras tanto, el plan de ingresos sobrecumplió su compromiso inicial, debido, en gran medida, al trabajo realizado en el taller de Ediciones Ávila, donde se confeccionaron productos de papelería con gran demanda. Esto forma parte de una ampliación del objeto social del CPLL, ya que son una Unidad Presupuestada con Tratamiento Especial, y les es vital incorporar nuevas formas de financiamiento.
Yanelis Santos Nieves explicó que en el año que recién terminó hubo que hacer gastos no planificados en el presupuesto, ya fuera en reparación, en eventos, u otros. “Hemos ingresado bastante, pero nos hemos visto apretados con el dinero, porque debimos asumir cosas que no estaban planificadas”.
“La Feria, por ejemplo, tuvo un gasto enorme, más de un millón de pesos, porque la planificación se hace de un año para otro y en 2021 los precios no estaban como en 2022, en cuestiones de alimentación, hospedaje, transporte.
“El presupuesto que se le da al libro solo alcanza para pagar salarios; lo demás lo tenemos que ingresar con nuestros productos. Por eso, a partir de este año, hay servicios que se van a abrir en la editorial. Y tenemos que poner más empeño en la gestión de venta en las librerías, con lo que tenemos”.
Con todo y eso, y muy a pesar de los apagones que por esos días afectaron todos los procesos en el país, la Feria del Libro provincial tuvo muy buenos resultados, reconocidos a nivel nacional. “El ministro de Cultura estuvo aquí durante la Feria y se mostró muy satisfecho del trabajo que habíamos hecho”, comentó la directora del CPLL.
En ese espíritu de congratulaciones, el balance no podía dejar de mencionar a los escritores que obtuvieron galardones en concursos nacionales, entre ellos Leo Buquet, Leonel Daimel Aguilar García, Félix Sánchez, Leidy Vidal García, Heriberto Machado Galiana y José Rolando Rivero.
También se habló de lo negativo enfrentado en 2022, principalmente, la falta de recursos materiales: tres librerías, la sede del CPLL y Ediciones Ávila, y el almacén del CPLL, están en mal estado constructivo —más que nada, por problemas en el techo—, y su reparación está planificada para 2023.
Se dijo que la falta de combustible impidió visitar los municipios; por falta de insumos, el plan editorial de 2022 presentó atrasos que han impedido aprobar el plan 2023; los medios de transporte no están en buenas condiciones, lo que afecta también la gestión comercial en los municipios.
Asimismo, se expuso que las direcciones municipales de Cultura deben ver a las librerías como parte de sus instituciones, algo no logrado en todos los casos. “Las direcciones municipales de Cultura no ven las librerías como suyas, como una institución cultural más del municipio”, afirmó Santos Nieves.
Algo que afecta muchísimo, no solo las ventas de libros sino incluso al desarrollo cultural de los territorios, es cierta apatía o desinterés notable de las propias institucionales culturales, como bibliotecas o casas de cultura.
Según se expresó allí, las bibliotecas municipales e incluso la provincial casi no compran libros. ¿Cómo se puede entender eso, si el libro es el centro del trabajo en una biblioteca?
La escritora, editora —y librera por cuenta propia— Carmen Hernández Peña se refirió a que un asesor literario que se respete tiene que ir a la librería de su municipio y saber lo que están vendiendo. Porque, si no, ¿qué va a promover entre sus talleristas?
En el resumen del balance quedó manifiesto el talento del equipo editorial, el de los escritores, y el empeño de la parte comercial y administrativa del CPLL, que le permitieron sortear un año difícil y hacerlo incluso con éxito. Por ello, tampoco faltó en este encuentro el reconocimiento a los mejores del año.