Tarea de todos

En la carta Unos construyen y otros desbaratan (13 de julio), José Antonio Sardiñas Falcón se refería a que seguramente hay un presupuesto destinado a construir los depósitos de basura (supiaderos) y que luego, “lo mismo por accidentes, descuidos o irresponsabilidades, acaban con esas construcciones”, y ponía los ejemplos de lo sucedido en Onelio Hernández, esquina a Isabel, y en Martí, frente a la Empresa Municipal de Gastronomía de Ciego de Ávila.

Opinaba, además, que, en nuestro municipio, “en todas las esquinas se deposita basura por cualquiera, pues, por falta de combustible, neumáticos, baterías, etcétera, no se puede recoger sistemáticamente, y ello provoca que estos depósitos se llenen y se llenen, lo mismo de la basura cotidiana que de escombros, podas y talas de árboles, animales muertos y demás”.

Inaudis Crespo Morales, director de Comunales en el municipio de Ciego de Ávila, responde a las preocupaciones planteadas por el lector. Reconoce la creación de los microvertederos en cada esquina de la ciudad; “debido al déficit de combustible y la falta de piezas de repuesto por la situación económica del país, el ciclo de recogida se alargó a 10 días o más, priorizando los policlínicos, hospitales, hogares de ancianos, escuelas y círculos infantiles.

“Sumado a esto están las indisciplinas sociales; en ocasiones, le hemos pedido a los delegados que, de conjunto con las organizaciones de masas de las circunscripciones, nos ayuden para que no se creen microvertederos en las esquinas”. Lo que, al parecer, no ha dado el resultado que se necesita.

Crespo Morales explica, respecto al supiadero de la calle Onelio Hernández, esquina a Isabel, que “fue construido por los padrinos de la circunscripción, con sus propios medios, por lo que no tiene las condiciones necesarias; no obstante, la próxima semana se va a reparar por la unidad de Comunales”.

Acerca del depósito que está frente a la Empresa Municipal de Gastronomía, expresa que “fue construido por la Empresa de Prefabricado y Premezclado; dado el incidente ocurrido, el fin de semana se demolió y se va a reconstruir la próxima semana con un mejor diseño, de manera tal que el cargador o el mustang tengan espacio suficiente para realizar su trabajo”.

Cuidar lo que se hace para el pueblo y tener una ciudad limpia, en armonía con el medio ambiente, es tarea de todos; en ello tenemos que implicarnos tanto las entidades estatales, como quienes vivimos en cada barrio. Recordemos el refrán: “No es más limpio el que más limpia, sino el que menos ensucia”.