Al parecer, ni personalmente ni a través de estas páginas, Arquímides Morales López podrá leer la respuesta de Lídisy Rodríguez Valero, directora general de la Empresa de Correos Ciego de Ávila, a la carta publicada el pasado 12 de diciembre de 2023 (Camisa de fuerza).
En dicha misiva, Morales López refería que en el contrato firmado años atrás con la entidad responsabilizada con la entrega de la prensa escrita, se dejaba claro que, para los casos fortuitos o de fuerza mayor, como podría entenderse el que nos ocupa, habida cuenta del déficit de recursos humanos que acusan no pocas entidades, el contrato manda que “la parte imposibilitada de cumplir sus obligaciones notificará inmediatamente y por escrito, a la otra parte, la existencia y duración de los acontecimientos”.
Ahora, la respuesta de Correos señala que “se visitó la dirección que aparece en la queja y el aquejado, según los vecinos, ya no reside en este lugar, y fue imposible llegar hasta su apartamento porque tiene una reja la entrada del hueco (de la escalera) en el edificio y los vecinos refieren que solamente se abre cuando la persona que se va a visitar baja para abrirla.
“Según Procedimiento aprobado en la Empresa de Correos de Cuba, cuando el cliente delimita la entrada a su domicilio, el cartero no puede violarlo y, para el caso en cuestión, el cliente debe pactar con los vecinos de los bajos que reciba el servicio que viene dirigido a su domicilio, según la dirección que aparece en el contrato de prensa.
“Los carteros no pueden dejar sus valores (bicicleta, prensa, giros, cartas, telegramas, publicaciones, envíos, pagos, etcétera.) a merced.
“Señalamos que la Empresa de Correos de Ciego de Ávila nunca ha dejado de vender la prensa nacional y provincial, teniendo para la venta en esa zona un total de 400 periódicos Granma, 200 Juventud Rebelde Dominical, 400 Trabajadores y 400 Invasor con la secuencia establecida.
“Además, en todas las oficinas de Correos, el horario establecido ajustado, teniendo en cuenta la contingencia energética, es de 7:30 a 11:00 de la mañana”.
En una zona sin carteros ni personal para portear la prensa, porque, como decía el escrito de Arquímides, “cesaron de sus funciones a todos los carteros (como medida ante un posible hecho delictivo) y, desde entonces, ese y otros servicios han sido afectados”, el hecho de que el aquejado no estuviera en su domicilio el día de la visita, que el hueco de la escalera tenga una reja, o que los carteros no puedan dejar sus valores a merced, es la justificación para que no se le entregue la prensa contratada y pagada anticipadamente a un cliente. ¿Será que no hay forma de que aparezca la solución a este problema, que no solo ocurre en esa zona, al menos en este municipio?