• “Teme al hombre de un solo libro”, es una aguda sentencia de Santo Tomás de Aquino (1224 /1225–1274), fraile católico, teólogo y pensador italiano, catalogado como uno de los intelectuales más sistemáticos y profundos de la historia.

En la sentencia que encabeza esta nota, señala que el hombre que conoce un solo libro, pero lo conoce bien, es un adversario terrible. Otra interpretación de la sentencia es la siguiente: Teme al hombre que solo conoce un libro y por él juzga de todo.

Fue el principal representante de la enseñanza escolástica, uno de los mayores exponentes de la teología sistemática, y el principal defensor de la teología natural; y en la metafísica su obra devino una de las fuentes más citadas del siglo XIII.

Su obra es inmensa y las más conocidas son las tituladas Summa Theologiae y Summa contra Gentiles, esta de 410 capítulos en cuatro libros.

• Sepa, amigo internauta, que hirviendo los cascos del ganado se obtiene el llamado aceite de pata de vaca, el cual se emplea en la lubricación de algunas maquinarias y para aderezar cueros. Tiene la ventaja de no solidificarse.

• En épocas remotas, cuando se decía que alguien era de alto copete, se referían a personas de elevada dignidad o adineradas.

• Caridad es nombre propio de mujer, que nos llega del latín, con varios significados: cariño, amor y afecto.

• Un kilogramo de polen tiene tres veces más cantidad de proteínas que la misma cantidad de carne de res.

• Es la ciudad de Cárdenas, en la provincia de Matanzas, el primer lugar en América en que se erigió una estatua dedicada a Cristóbal Colón. Tal suceso histórico-cultural ocurrió en el año 1826.