Pedro Flores: popular y prolífico

Tomada de https://www.elvocero.com“Yo no he sido músico nunca, no toco ningún instrumento, no conozco una nota musical. Yo no soy poeta; lo que tengo es obra de Dios”, sentenció el destacadísimo compositor puertoriqueño Pedro Flores (1894-1979).

Sin embargo, pese a su desconocimiento académico, Flores compuso más de 1000 temas. Eso sí: era amo y señor de un excelente talento natural.

Los entendidos opinan que, junto con Rafael Hernández, califica como el más popular y prolífico autor de canciones borinqueñas del siglo XX.

Humilde de cuna —eran una docena de hermanos—, estudió magisterio. Incluso, obtuvo un título universitario de Inglés. Fue reclutado por el ejército norteamericano para la II Guerra Mundial.

Realizó diferentes labores. Emigró a los Estados Unidos, específicamente a Nueva York, donde asumió diferentes faenas: pintor, obrero constructor…

Más adelante conoció a Rafael Hernández, encuentro que sirvió para descubrir que podía hacer temas musicales.

Tras adentrarse en los secretos y detalles para hacer un grupo musical, unos años después configuró el que sería su famoso Cuarteto Flores. Vale apuntar que Pedro poseía ojo clínico aguzado para hacerse acompañar de buenos músicos. Según las necesidades, el Cuarteto se transformó en sexteto y hasta en orquesta.

Notas informativas precisan que lo que lo lanzó a la cúspide fueron sus composiciones. Se conoce que entre las primeras estuvieron las tituladas Celos, Que te pasa y la gustada Blancas Azucenas.

Intérpretes que ya tenían nombres cimentados en el ámbito musical como Daniel Santos y Chencho Moroza convirtieron en preferidos muchos temas, no solo en la gran urbe, sino más allá. A los mencionados se unieron Perdón, Esperanza inútil, Bajo un palmar, Despedida, Ruego de amor, Obsesión, Sin bandera, Linda, Si no eres tú, popularizados, además, entre otros, por Pedro Vargas, Benny Moré y Marco Antonio Muñiz.

Pedro Flores llegó a constituir algo así como una fundación, mediante la cual, administrada por su familia, otorgaba becas a jóvenes con marcado talento para que estos estudiaran música y se formaran técnicamente

Don Pedro, el de las Flores, como se le llamó en Venezuela, a sugerencia del poeta y periodista Jesús Roca Marcano, fue uno de los máximos exponentes tanto de bolero como de la guaracha en toda Centroamérica y el Caribe.

En el transcurso de su estancia en La Habana —década de 1950— el son cubano influyó en el compositor, de manera tal que llegó a escribir los llamados boleros soneados, como son los casos de Blancas Azucenas y Bajo un palmar, interpretados por el genial Panchito Riset.

Entre otros reconocimientos, Don Pedro recibió el homenaje tributado por el Senado de Puerto Rico, en 1974, y el Banco Popular hizo una edición de sus temas más gustados. Tal recopilación fue titulada Al compás de un sentimiento.

Curiosidades

• El 18 de septiembre de 1980, hace ya 42 años, el cubano Arnaldo Tamayo Méndez tuvo el honor de ser el primer cosmonauta latinoamericano. Él y Yuri Romanenko sobrevolaron el globo terráqueo durante varios días, a bordo de la nave Soyuz 18.

• Sepa, amigo internauta, que nuestro cuerpo contiene el carbón suficiente para hacer, así como lo lee, unas 900 minas para lápices.

• Al físico y químico francés Joseph Gay-Lussac (1778-1850) se debe la formulación de la Ley de dilatación de los gases. En 1804 hizo dos ascensiones en globo que lo llevaron a 7016 metros de altura, con el fin científico de estudiar las variaciones del magnetismo de la tierra. Además, descubrió el boro, un metaloide de volumen atómico 5, sólido, duro y de color negruzco, semejante al carbono.

• Para los amantes del cine: casi cuatro millones de dólares costó el rodaje de la película muda Ben Hur, filmada en los Estados Unidos en 1925.

• Lo agradable ayuda a los sentidos, pero lo grato guarda relación con los sentimientos. Lo primero, recrea; pero lo segundo, conmueve.