Julio Brito, cantor melódico de Cuba

“Valle plateado de luna/ sendero de mis amores/ quiero ofrendarle a las flores/ el canto de mi montuna…/”. Así inicia el tema musical que marcó para la eternidad la rica carpeta autoral del destacado compositor cubano Julio Valdés-Brito Ibáñez (1908-1968), conocido nacional e internacionalmente como Julio Brito.

El amor de mi bohío, que así se tituló la famosa guajira, fue escrita en 1937 por Brito, inspirado autor que brilló como pianista, cantautor y director de orquesta, entre otras especialidades.

Se conoce que desde pequeño se interesó por la música. Mucho tuvo que ver en su desarrollo su primer profesor, Pedro San Juan, del cual se afirma,por los entendidos, que lo dotó de una preparación musical integral.

Ya a los 16 años se le vio como integrante de la orquesta de Don Azpiazu, en el rol de ejecutante de saxofón. También aprendió los secretos de varios instrumentos: guitarra, vibráfono, la batería, el piano y dirección orquestal.

Desde esa rica etapa, precisan los estudiosos de su obra y personalidad, estudió canto de manera profesional y firmó sus primeras obras, muchas de las cuales fueron muy populares. Además, musicalizó películas como las tituladas Tan Tan y Embrujo antillano.

Tuvo tres hijos. En el caso de los dos primeros, le puso su nombre al primogénito y el de su hermano Alfredo, al segundo, quienes formaron el cuarteto Los Brito, formación que alcanzó relieve en la Mayor de las Antillas.

Numerosos temas del destacado autor habanero han sido interpretados, y lo son aún, en voces tanto nacionales como foráneas como las de René Cabel, Leo Marini, Benny Moré, Panchito Riset, Pedro Vargas, Lalo Montané, el trío de los Hermanos Madrigal, Barbarito Diez con la orquesta de Antonio María Romeu…

Entre sus principales obras sobresalen Florecita, Tus lágrimas, Flor de ausencia, Acurrucadita, Mira que eres linda, Serenata guajira y, por supuesto, la archiconocida El amor de mi bohío.

Por la cubanía de sus textos, Julio Brito fue conocido como El Pintor Melódico de Cuba. El amor de mi bohío fue grabado por cantores de varios países y su preferencia llega a los días actuales.

• El hierro forjado empleado en la construcción de la afamada Torre Eiffel pesa unas 7 300 toneladas, a lo que se suma el originado por los ascensores, tiendas y antenas, con lo cual, el peso total de esa edificación se eleva aproximadamente hasta las 10 000 toneladas.

• Uno de los padres fundadores de la geografía zoológica fue el naturalista inglés Alfred Russell (1823-1917).

• Sepa, amigo internauta, que el primer campeón olímpico latinoamericano fue el cubano Ramón Fonst, cuando en 1900 se agenció el título en la especialidad de espada en las competencias de esgrima. Tal hecho ocurrió en 1900, durante la celebración en la capital francesa, París, de la segunda edición de los Juegos Olímpicos de verano.

• Cada día que transcurre, aunque el que lee estas líneas no se dé cuenta, en nuestros cerebros dejan de existir unas 100 000 neuronas. Y jamás se recuperan.