Que nadie lo ponga en duda: las mujeres somos compañeras naturales de los hombres, y siempre hemos sorprendido a la humanidad. Sí, y no es feminismo. Así como zumba y suena, las mujeres hemos sido y, por supuesto, continuaremos siendo capaces de hacer o realizar las más singulares acciones que nos propongamos.
Por eso el caso que nos ocupa hoy no es, ni mucho menos, la excepción de la regla. Se trata de una de las conductoras más famosas del Ferrocarril Subterráneo, Harriet Tubman (1822-1913) nacida bajo el nombre de Araminta Ross, en el condado de Dorchester, Maryland, Estados Unidos.
En algunas fuentes biográficas se precisa que los primeros años de la vida de Tubman los pasó esclavizada en la región de la costa este de Maryland, obligada a cuidar niños, arar y trabajar en el muelle.
Cuando tenía 13 años, un supervisor le lanzó una pesa de metal a un hombre esclavizado para que volviera a trabajar, pero acabó dándole a ella, provocándole traumatismo craneoencefálico. Tres de sus hermanas fueron vendidas y separadas de la familia durante su infancia, pero sus padres, Rit y Ben Ross, continuaron resistiendo y manteniendo unida al resto de la parentela.
Sepan, amigas y amigos de la Gran Red de Redes, que, siendo una mujer joven, se casó con John Tubman, quien era un hombre libre, pero su categoría no era suficiente como para proteger a su mujer de que la vendieran de forma arbitraria, como sucedería en 1849.
Sin embargo —precisan fuentes consultadas—, el intento no fructificó debido al estado de salud de Harriet, quien posteriormente a este acto, huyó por primera vez, junto a sus hermanos. La huida también resultó un fracaso, pues sus hermanos regresaron a la finca propiedad del esclavista Edward Brodess.
Según varios datos revisados, se conoce que Tubman llegó a Pensilvania desde Maryland con la ayuda del Ferrocarril Subterráneo. Una vez allí, intentó liberar a otros miembros de su familia de la esclavitud, por lo que regresaría a Maryland en 13 ocasiones para rescatarlos y reunirlos en libertad.
La intrépida dama proporcionó información a otros esclavos para ayudarlos en su propia lucha; armada con un revólver y con su fe, condujo a 70 esclavos a la libertad.
Harriet Tubman sirvió en la Guerra Civil, en Carolina del Sur, como líder, enfermera, cocinera, exploradora, espía y, también se convirtió en la única mujer que dirigió una acción militar durante la guerra. Recibió el apodo de General y, fue capaz de dirigir a las tropas negras en el ataque al río Combahee, el 2 de junio de 1863. Acción que involucró pequeños barcos y tropas que destruyeron carreteras, quemaron plantaciones y recolectaron suministros de ganado y cultivos. Como resultado de la redada, fueron liberados 750 esclavos.
Conozcan, amigos internautas que, Tubman era analfabeta y carecía de formación oficial, pero eso no la frenó en sus propósitos, sino que utilizó sus experiencias en la esclavitud para ayudar a su eliminación. Entabló amistad con prominentes abolicionistas e intelectuales, blancos y negros, y aprovechó estos vínculos para conseguir apoyo financiero para su causa.
Otra versión la consigna como la “maquinista” más famosa del Ferrocarril Subterráneo. Apodada “Moisés”—en referencia al personaje bíblico que sacó a su pueblo de la esclavitud—, se convirtió en la persona más exitosa que llevó personalmente a los esclavos a la libertad a través de su servicio en el Ferrocarril Subterráneo.
Una vez concluida la guerra de Secesión, esta fémina continuó su activismo, luchó por el sufragio femenino y defendió a los afroamericanos libres, hasta sus últimos años, a pesar de no gozar de buena salud.
En 1896, siendo pobre, logró comprar una propiedad de 10 hectáreas en el norte del estado de Nueva York, que más adelante se convertiría en una residencia para la gente anciana e indigente de color. Allí la sorprendió la muerte en 1913.
Agreguen a su acervo que en algún momento se pensó que iba a figurar en la divisa estadounidense, en un diseño planificado para remplazar la cara de Andrew Jackson por la suya, en los billetes de 20 dólares.
Esto nunca se realizó, pero la mujer negra, Harriet Tubman es aún venerada por su valentía y sigue siendo una de las figuras históricas estadounidenses más conocidas.
Curiosidades
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• En tiempos de uso y abuso de redes sociales, conozcan amigos internautas que la app de mensajería instantánea WeChat, es el principal medio de comunicación en el continente asiático y algunas estadísticas estiman que es mucho más grande que Instagram. Cuenta con alrededor de ¡900 millones! de usuarios. Un secreto que hace única esta app es que con ella se pueden pagar recibos, gestionar una cita médica, comprar entradas, pedir comida a domicilio y otras acciones más.
• Los especialistas estiman que, dentro de nuestro cuerpo, tenemos la sorprendente cifra de ¡100000 kilómetros! de venas, así como zumba y suena, dos veces y media la circunferencia terrestre.
• “La ira es un ácido que puede hacer más daño al recipiente en el que se almacena, que a cualquier cosa sobre la que se vierta”, sabia sentencia rubricada por el periodista, escritor y humorista estadounidense Samuel Langhorne Clemens, más conocido como Mark Twain (1835-1910)
• Amigas y amigos que gustan de estas pequeñas cápsulas, agreguen a sus conocimientos musicales que en el gigante sudamericano Brasil, existe una discoteca de música electrónica dedicada a Dios. Tiene como nombre Cristoteca, y en cada fiesta que allí se realiza se proyectan imágenes de Jesús y sus apóstoles en pantallas LED, y las canciones que se ponen son religiosas, pero con ritmo electrónico.