Edwin Hubble cambió la visión científica del universo

 hubbleTomada de saberesyciencias.com.mx Aficionado a la ciencia ficción desde muy pequeño, Edwin Powell Hubble, más conocido simplemente como Edwin Hubble (1889-1953) fue uno de los astrónomos más reputados del siglo XX.

Nacido en Marshfield, un pequeño pueblo de Missouri, a la temprana edad de ocho años se mudó junto a sus padres y siete hermanos a la ciudad de Chicago. Allí comenzaría la escuela demostrando grandes aptitudes para la ciencia y el deporte.

Sepan las amigas y amigos de la Gran Red de Redes que recibió una beca para estudiar en la Universidad de Chicago, donde logró graduarse en jurisprudencia cuatro años después, en 1910, siguiendo los deseos de su padre. Era un joven atlético, con gran habilidad para actividades deportivas como el béisbol, el baloncesto o el boxeo.

Tras un breve paso por la Universidad de Oxford, en Inglaterra, donde continuó con los estudios que comenzó en el campo de las leyes en Chicago, se destacó como joven promesa de los pesos pesados, por lo que le propusieron ser boxeador profesional. Sin embargo, decidió dejar los puños de lado y abrazar las estrellas. Interesado por la astronomía, muy pronto regresaría a Chicago para reorientar su carrera y obtener un doctorado en física.

Sus andanzas como astrónomo comenzaron allá por 1917, cuando tuvo la suerte de completar sus estudios de postgrado en el Nuevo Observatorio del Monte Wilson bajo las órdenes del astrónomo solar estadounidense George Ellery Hale.

La declaración de guerra de Estados Unidos a Alemania, el 6 de abril de 1917, llevó a Hubble a cumplir servicio en la Primera Guerra Mundial, provocando que se apresuraran sus primeras investigaciones fotográficas sobre nebulosas débiles.

Este destacado astrónomo, después de servir en Francia, se reincorporó al observatorio de Mount Wilson. Así las cosas, en 1919, realiza uno de sus primeros hallazgos, al descubrir que en el interior de la Vía Láctea existen nubes de hidrógeno iluminadas por la existencia de estrellas en su interior.

De una fuente extraigo que, por aquel entonces, se pensaba que las nebulosas formaban indiscutiblemente parte de nuestra galaxia, sin embargo, en 1923, Hubble descubrió la existencia de unas estrellas de brillo variable llamadas cefeidas en la galaxia de Andrómeda, demostrando, por un lado, que esta no formaba parte de la Vía Láctea, y estimando su distancia, la cual calculó en ¡1.5 millones! de años luz.

El hecho de que la gran mayoría de galaxias parecía alejarse de la Tierra, constituía una de las mayores incógnitas de su tiempo, y en ese estudio decidió concentrarse, pocos años después de su primer descubrimiento.

Otra fuente consultada explica que, en los años consecutivos, con la ayuda del astrónomo Milton Humason, se centró en determinar la distancia de las galaxias en base a los cambios espectrales medidos por Humason. Publicó su primer artículo sobre la relación entre el corrimiento al rojo y la distancia a la que se encontraba una galaxia, relación hoy conocida como Ley de Hubble.

En este, concluyó que la única explicación posible pasaba por que, a excepción de un grupo cercano de galaxias conocido como Grupo Local, todas las nebulosas extragalácticas se estaban alejando, y que, cuanto más lejos se encontraban, más rápidamente se alejaban, lo que solo tenía sentido si el propio Universo, incluido el espacio entre galaxias, se expandía.

Diversas fuentes señalan la existencia de una polémica abierta, en torno al hecho, de si fue Hubble quien realizó realmente este descubrimiento, que se atribuye al astrónomo y sacerdote belga Georges Lemaître, quien expuso sus conclusiones dos años antes, en un congreso astronómico en Holanda.

La producción de Hubble fue mucho más allá; en 1935 descubrió el asteroide (1373) Cincinnati, y también ideó el sistema más utilizado en la actualidad para clasificar galaxias, agrupándolas según su apariencia en imágenes fotográficas y ordenándolas en lo que se conoció como la secuencia de Hubble.

Aunque permaneció durante toda su vida en el observatorio de Mount Wilson, a partir de 1936, su producción científica se ralentizó notablemente. Durante la Segunda Guerra Mundial trabajó como civil para el ejército de Estados Unidos, como jefe del Laboratorio de Investigación de Balística, donde dirigió varias investigaciones enfocadas a aumentar la potencia de fuego efectiva de bombas y proyectiles.

Participó también, en el diseño del mastodóntico telescopio americano de Monte Palomar en California, antes de morir. Sus hallazgos cambiaron para siempre la visión científica del universo y es por ello que, en su honor, el Telescopio Espacial Hubble, una leyenda aún viva de la exploración espacial, lleva su nombre.

Curiosidades

Motu proprio, “por voluntad propia”, se usa habitualmente en el lenguaje coloquial y hace referencia a aquellas acciones que alguien realiza por iniciativa propia.

• Refleja el portal cubano Ecured, que el mito del cíclope surgió tras los descubrimientos de cráneos de seres gigantes con un orificio enorme en el centro de la cara, lo que hacía que pareciese la cabeza de un hombre con un solo ojo enorme. No obstante, ese sería el cráneo fósil de un mamut enano Elephas falconeri, y ese gran orificio sería la cavidad de la trompa.

• Si no lo sabía, amigo lector, le digo que el pelo crece más rápido en el verano, debido a que el calor estimula la circulación sanguínea y fomenta un crecimiento más rápido. Ahora bien, recuerde que es muy importante cuidar el pelo en verano, ya que existen varios factores que pueden causar efectos dañinos, como la exposición solar excesiva, la sal del agua de la playa, o los productos químicos de las piscinas.

• “Prefiero dibujar a hablar. Dibujar es más rápido, y deja menos espacio para la mentira”, sabia e interesante sentencia rubricada por el arquitecto y teórico de la arquitectura, urbanista, pintor, escultor y hombre de letras suizo, nacionalizado francés, Charles-Édouard Jeanneret-Gris, en 1930, más conocido a partir de la década de 1920 como Le Corbusier  (1887-1965).

• Sepan los amigos internautas que el escritor, poeta, crítico y periodista romántico estadounidense Edgar Allan Poe (1809-1849) y Virginia Eliza Clemm se casaron cuando tenían 27 y 13 años, respectivamente. Ella murió joven y Poe cayó en un estado depresivo que lo llevó a intentar suicidarse con una sobredosis de láudano, un sedante y analgésico muy utilizado en la época.