La eliminación del servicio de cobro a domicilio de la factura mensual de la corriente eléctrica es una realidad de progresiva aplicación en el país, lo que exige soporte tecnológico y el conocimiento de la población para utilizar los canales habilitados. Todo comienza por la tenencia de las llamadas tarjetas magnéticas, las cuales superan hoy en la provincia las 165 000, de ellas, 93 685 del Banco de Crédito y Comercio (Bandec) y 71 940 del Popular de Ahorro (BPA).
En lo que va de 2019, solo los clientes de Bandec han realizado en los cajeros automáticos del territorio un total de 709 065 operaciones de pago, por supuesto, no solo de la electricidad. Es lo más práctico, sobre todo cuando la persona va a cobrar el salario o la chequera de jubilación.
“Pero existen otras vías para tal fin, explica Vlamir Rodríguez Fernández, jefe del Departamento de Banca Electrónica, de la Dirección Provincial de Bandec, para las cuales los interesados deben solicitar en las oficinas bancarias la tarjeta matriz (complementaria), que sirve como garante al monto que cada quien vaya a pagar en cada caso.
“Además, van en aumento el empleo de la telefonía móvil —detalla el directivo—, para la cual es preciso adquirir a través de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A la correspondiente aplicación o Transfermóvil, y que el medio disponga del sistema operativo Android 4.4 o superior a este; y el uso de la Banca remota, por Internet, tanto en los dominios .com como .cu y entrando, en el caso de Bandec, a la dirección www.kiosco.bandec.cu/kiosco/ y a bancaremota.bpa.cu, del BPA.
También el teléfono fijo resulta otra posibilidad para saldar la cuenta de la corriente, para lo que, según Vlamir, Bandec tiene habilitado el número 80201996; o a través del 80200272, del Banco Popular de Ahorro, asegura Isabel Cristina Ventura, subdirectora provincial de esa entidad. En ambos casos una operadora se encarga de informar al cliente y solicitarle los datos necesarios, relativos a las tarjetas magnéticas y la matriz.
Las condiciones tecnológicas para garantizar este y otros servicios se van consolidando; sin embargo, todavía son insuficientes, toda vez que únicamente hay cajeros automáticos instalados en los municipios de Ciego de Ávila, en Morón (incluidos en el destino turístico Jardines del Rey y en la Isla de Turiguanó) y otro existente en el poblado de Baraguá; como, asimismo, a veces, se suceden problemas con la conexión digital de estos equipos.
“Lo importante en las condiciones actuales —opina el directivo de Bandec— es seguir familiarizando a la población con estos sistemas informáticos disponibles, insistir en este tipo de cultura, que, al final, determinará en el bienestar de la sociedad.”
Todo un preámbulo a lo que seguirá ocurriendo en la provincia durante el venidero mes de septiembre, cuando cada lector de la electricidad dejará de cobrar la factura al menos en una de sus rutas.