Cuba implementa desde este sábado el aislamiento institucional de todos los viajeros internacionales y reduce vuelos comerciales, ante la escalada de la transmisión de la COVID-19 en el país, originada, mayormente, por indisciplinas en los domicilios de personas que arribaron desde el exterior.
Los cubanos residentes en la nación cumplirán el aislamiento, libre de costo, en centros habilitados en cada provincia.
Mientras, los extranjeros y cubanos no residentes serán aislados en instalaciones hoteleras designadas en cada territorio y sí costearán la estancia y la transportación.
Además, se redujeron las frecuencias actuales de vuelos procedentes de Estados Unidos, México, Panamá, Bahamas, República Dominicana, Jamaica y Colombia; así como se mantiene suspendido el reinicio de frecuencias a Nicaragua, Guyana, Trinidad y Tobago, Surinam, y se detienen las frecuencias a Haití.
Se autorizará el arribo de vuelos sin pasajeros para evacuar a personas varadas en Cuba, extranjeros o residentes en el exterior.
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