Cual corazón del centro histórico de Ciego de Ávila nacía, en diciembre de 2008, el bulevar en la céntrica calle Independencia. Desde entonces, cada amanecer trastoca la tranquilidad de las cuadras convertidas en fieles testigos del constante ir y venir de quienes habitan, o están de paso por la ciudad cabecera de la provincia.
Lugar de obligada visita para los de afuera, punto de encuentro para amigos y enamorados, o sitio habitual para los fanáticos de la Wi-Fi, tiene el paseo avileño la dicha de acoger en su espacio desde mercados, sucursales bancarias, restaurantes, instituciones culturales y farmacias, hasta el siempre concurrido Coppelia.
Y como quien se resiste a los años, agradece el retoque de las últimas semanas que le permita sobreponerse al paso del tiempo y de la dejadez humana. Por fin le miran con otros ojos, allá por donde el Hotel Rueda regala notas de elegancia y otro tramo le nace hasta conectar con la Alameda de la Locución, como para celebrar la primera década de vida.
Bulevar avileño visto desde las alturas del Edificio de 12 plantas
De todo un poco, para llevar y para dejar
En el antiguo Banco de Canadá, hoy sucursal de Bandec, también renuevan imagen
Siempre hay tiempo para un café en la Fontana
El Don Pepe, para disfrutar de la gastronomía avileña en familia
Pinceladas de la cultura árabe en pleno bulevar avileño
Un heladito no viene mal para sofocar el calor
Luego de varios años, por fin la reapertura del Hotel Rueda es una realidad
Aledaño al Hotel Rueda, lo que será el último tramo del paseo avileño