Tigres contra la pared en béisbol cubano

Pudieran o no ser el “tiro de gracia” estos tres fracasos de Los Tigres ante Granma, pero lo cierto es que, a falta de solo 23 partidos para que concluya el calendario del equipo en esta 60 Serie Nacional de Béisbol, todo parece indicar que la afición de Ciego de Ávila tendrá que esperar al nuevo año para soñar con ver de nuevo a los tres veces campeones nacionales entre los primeros en la tabla de posiciones.

A Bayamo viajaron los discípulos de Yorelvis Charles con el optimismo que da ver a un cuerpo de tiradores muy mejorado, al extremo de ubicarse entre los de mejores números del campeonato, sobre todo, en los últimos 20 compromisos. Pero en el estadio Mártires de Barbados todo se derrumbó.

• Así relató Invasor los partidos del jueves.

Luis Marrero, Arnaldo Rodríguez y Dachel Duquesne, con tan buenas actuaciones en sus últimas salidas, esta vez estuvieron muy alejados de la zona de strike. Y ante una tanda de bateadores como la de Los Alazanes esto es casi un suicidio.

No obstante, los avileños aún tienen opciones de terminar en el octavo puesto, pero esto se haría realidad de mantener un paso extraordinario, lo que quiere decir, de manera más clara, que deberán ganar 19 choques y solo perder cuatro, algo que, a juzgar por la historia de esta lid, parece poco menos que imposible.

Pero no fueron los de Yorelvis Charles los únicos que tuvieron un funesto desempeño esta semana, pues también cayeron tres veces Villa Clara y Holguín, lo que ha despejado un tanto el panorama de la clasificación.

Es evidente que, desde el punto de vista numérico, ninguno de estos tres conjuntos está eliminado, pero sus respectivas tareas, en lo que resta del calendario, tendrían que rozar lo perfecto para aspirar al octavo puesto. Si lo duda, le invito a echarle un vistazo a la tabla de posiciones.

Lo anterior no quiere decir que ahora mismo todo esté claro, pues ni el mismísimo Granma, que ocupa el lugar cimero, puede darse el lujo de una pequeña mala racha, porque podría entrar en apuros. Téngase en cuenta que Mayabeque e Industriales están pegaditos a la zona privilegiada.

Los Alazanes han tenido una labor pareja en todos los eslabones de juego. Son primeros en la defensa (979) y tanto su pitcheo (4,48) como su ofensiva (317) aparecen en el grupo de avanzada colectivamente.

No pocos pensaron que con las ausencias —por motivos de contratos con otras ligas— de Lázaro Blanco, su mejor lanzador, y el destacado jardinero Roel Santos, los de Carlos Martí iban a descender en el rendimiento, pero hasta el momento su ritmo de juego ha seguido igual y ya suman ocho éxitos en línea recta.

Y si de estabilidad se trata, debe reconocerse que el campeón Matanzas, a pesar de su derrota del pasado jueves, ha mantenido un paso ganador en los últimos 20 compromisos, al igual que Sancti Spíritus, Pinar del Río y Las Tunas.

Todo lo contrario pudiera escribirse de Camagüey, Cienfuegos y Santiago de Cuba, que en las últimas subseries muestran una inestabilidad manifiesta. Por momentos parecen conjuntos de talla extra y en otros que no tienen suficiente fuerza para luchar en estas postrimerías de la lid.

Industriales demostró en sus dos triunfos ante Los Elefantes que son reales sus aspiraciones de asistir a la postemporada. En estos momentos aparecen a solo una raya de Las Avispas, que ocupan la octava plaza. Lo de Mayabeque es digno de elogios. ¡Qué levante la mano el que lo dio en los análisis de precompetencia como posible clasificado!

Lo cierto es que entre Jeison Martínez (44) y Dennis laza (61) se han echado al equipo encima, pues ya suman más de 100 impulsadas. Hay tres subseries que prometen “un mundo” este fin de semana: Elefantes-Cocodrilos, Gallos-Toros y Leones-Vegueros. El resto del programa se completa así: Indios-Alazanes, Azucareros-Huracanes, Leñadores-Tigres, Avispas-Cachorros y Cazadores-Piratas.

Antes de que se me olvide

Raúl González, el mejor bateador de Ciego de Ávila en esta temporada (403), es posible que pueda alinear en la subserie que inicia el equipo en el José Ramón Cepero ante Las Tunas.

Desde que lo vi batear unos tres años atrás, no tuve dudas de que en Yaismel Bravo la escuadra de Los Tigres tenía a un bateador de promedio. Su forma de conectar para todos los ángulos del terreno me trajo siempre a la mente al espirituano Yunier Mendoza, quien, por cierto, no se cansa de hacerlo bien en la pelota cubana. Es una lástima que, en el caso de Yaismel, siempre se ha visto como un jugador de cambio. Ya sé que los entrenadores que han pasado por el equipo saben de esto más que yo, pero no puedo evitar mi negación a coincidir con alguno de ellos.

Frederick Cepeda se convirtió el pasado miércoles en el primer jugador cubano que en nuestras series nacionales ha entrado en circulación en más de 4 000 oportunidades. Lo del espirituano, en eso de llegar a primera por sus méritos, es algo que está por encima de cualquier calificativo. Basta decir que en la actual campaña posee el mejor promedio de embasado hasta el momento, con un astronómico 572, pues a sus 57 imparables suma 72 boletos y dos pelotazos en 229 comparecencias a la caja de bateo.

Otro representante de la tierra del Yayabo, Yankiel Mauri, es el lanzador de mejor Promedio de Carreras Limpias con 1,09. El agramontino Frank Madan y el granmense Joel Mojena lideran los juegos ganados con nueve.

Por cierto, Madan comanda también los ponches con 68, pero en 100 entradas y dos tercio de labor, mientras el capitalino Pavel Hernández tiene 63 y solo ha trabajado en 61 capítulos.

Anda Alexander Jiménez por 344 de average. Un buen primer bate, sin lugar a dudas, pues su promedio de embasado es de 432.