Los tres inning completos que se jugaron este martes entre Ciego de Ávila y Sancti Spíritus, en el estadio José Ramón Cepero, dejaron la pizarra llena de ceros, pues las lluvias impidieron la continuación del partido por lo que este miércoles se reanudará, en el mismo escenario, a partir de las 10:00 de la mañana.
Solo entonces se sabrá cuál de los dos conjuntos arribará a la última subserie del Campeonato Nacional de Béisbol años con ventaja de un juego en el primer puesto.
Los dos abridores, Yairon Martínez, por los de casa, y Edelso Montesinos, por los visitantes, cumplieron bien en sus tres capítulos de labor, pero no podrán actuar en la reanudación.
Es posible que el mentor Yorelvis Charles opte por darle la responsabilidad, para el resto del partido, al derecho Fernando Betanzos, mientras que el mentor de Los Gallos pudiera darle la bola al zurdo Ariel Zerquera.
Si Sancti Spíritus logra el éxito, tendrá el boleto casi en los bolsillos, pues no solo iría a la última subserie con un juego de ventaja, sino que, en caso de empate, a su favor estaría el mejor balance en el enfrentamiento particular ante los avileños.
En el caso de que la victoria correspondiera a Ciego de Ávila, necesitarían triunfar en tres de los cuatro compromisos de la última subserie frente a Camagüey y esperar un fracaso de los espirituanos con Las Tunas.
Para mejor explicación: los aprendices de Tigres pasarían a los play off si en esos cuatro últimos choques obtienen igual balance que los de la hermana provincia.
En el grupo D ya no hay conjeturas: Santiago de Cuba es el clasificado, pues, aunque perdiera los siete choques que le restan, sería inalcanzable para Granma o Guantánamo, mientras que en la llave B, Cienfuegos solo necesitaría ganarle uno de los cuatros encuentros a Matanzas para merecer el pasaporte. En el A, la porfía aún es cerrada entre Pinar del Río e Isla de la Juventud.