Las dificultades por la pandemia que azota al mundo afectan a todas las generaciones de una manera o de otra, incluido el ámbito deportivo, sobre todo a profesores y atletas con aspiraciones inmediatas.
Moisés Bravo Torres, uno de los más experimentados técnicos del básquet avileño, está en el grupo de los preocupados, no solo por la salud, sino porque si no controla a sus alumnas puede desvanecerse el futuro de las Sirenas, nombre que identifica a la principal selección femenina de Ciego de Ávila en el deporte de las canastas.
Su caso, que no es único, lleva el respaldo de la Comisión Provincial, que concibe una estrategia para retornar a las prácticas en buenas condiciones, cuando lo permita la situación epidemiológica, y, mientras ese momento llega, cumplen la preparación en las casas y en grupos de pequeños formatos que en las últimas semanas se ejercitaron en la sala Giraldo Córdova Cardín.
Entre las muchachas abunda el deseo de volver a la normalidad, según diálogo reciente con la capitana del equipo Yessamy Concepción Díaz, quien se preparó como pudo en su hogar, ubicado en el poblado chambero de Falla.
Con solo 19 años y funciones de escolta sobre la cancha, la dinámica muchacha confía en la juventud del conjunto, elemento que augura perspectivas, a pesar del riesgo que implican las obligadas pausas ante la COVID-19.
El profesor Bravo y el metodólogo Alejandro Cartaya Herrera, delegado del equipo avileño, confirmaron a Invasor que las condiciones para entrenar con la seguridad y la calidad requeridas ya existen en la instalación, donde esta semana inicia sus faenas la preselección masculina bajo el método de burbuja.
No obstante, el listado de chicas que optarán por representar a Ciego de Ávila en venideras lides fue dado a conocer, y, tan pronto haya posibilidades, asumirán la nueva etapa de preparación.
Aunque por ahora, los eventos nacionales están suspendidos, es halagüeño tener organizado el trabajo para ejercerlo cuando se pueda, y las “espigadas niñas” lo agradecen.
De momento toca cuidar y mantener el control a distancia de cada deportista, labor en la que también influye el director asistente Yadir Duvergel Brooks.
Ciego de Ávila tendrá a Roxana López Rosell y Melissa Montero Piloto como bases organizadoras. Junto a Yessamy fungirán como escoltas Rocío Ramírez Valdés, Helen Hernández Ramírez, Yeilan González Pérez y Lixayan Prieto Salomón.
Las tareas de centro-delanteras estarán a cargo de Misleidys Rodríguez Caraballoso y Rachel Contreras Díaz; las centrales serán Sheila Molina Otaso, Leanet Gutiérrez Hernández, Yailet Vázquez Cervantes y Yilena Castillo Núñez, mientras Arixaday Viquillon Lobaina responderá en faenas de delantera.