Eta, como los fenómenos meteorológicos que le preceden, transforma las prácticas habituales en todos los sectores, incluido el deporte, cuya principal acción de este fin de semana en Cuba es el Juego de las Estrellas del béisbol nacional.
Lo previsto para el sábado en el estadio Guillermón Moncada, en Santiago de Cuba no aconteció cuando los pronósticos de lluvia se hicieron realidad en esa oriental provincia.
Sin embargo, la mayoría del movimiento deportivo cubano no ha tenido pausa y en correspondencia con el ímpetu competidor de esa rama, parte considerable de sus fuerzas asume labores, de las llamadas anónimas, pero vitales para asegurar el futuro del país.
Leonardo Rodríguez Sánchez, director provincial de Deportes en Ciego de Ávila, dijo que los diversos grupos de trabajo que funcionan en el territorio se activaron para cumplir las indicaciones en correspondencia con la etapa del actual meteoro.
“Tenemos nuestros puntos de dirección activados y establecimos guardias administrativas y obreras en nuestras instalaciones para asegurar los recursos que en ellas existen.”
Afirmó el directivo que también cuentan con lo necesario para recibir evacuados en la Escuela de Iniciación Deportiva Escolar Marina Samuel Noble y la Escuela de Profesores de Educación Física Manuel Suárez.
En la escuela Águedo Morales Reina se acondiciona su área de béisbol, pero las lluvias retrasarán las labores
Otra parte de las fuerzas ganará protagonismo en las labores de recuperación, que pueden abarcar disímiles frentes, con énfasis en el acondicionamiento de las áreas, dañadas por la intensidad de las lluvias.
En síntesis, numerosos miembros de la infraestructura dedicada a la actividad del músculo, se han transformado este fin de semana en simbólicas estrellas que aportan a la preservación de los bienes y al resguardo de quienes requieren, por residir en zonas vulnerables, lugares seguros para afrontar el combate contra la Naturaleza.
Con respecto a Los Tigres, ante el receso marcado por el Juego de las Estrellas, sus miembros disfrutan de una breve estancia junto a sus familias, pero el lunes deben retornar a sus actividades habituales.
La única excepción, los que sí se mantienen en competencia, son los ajedrecistas con cuentas en Internet, quienes en torneos recientes se han quejado por dificultades con la conectividad, hecho que no es exclusivo de Cuba, sin embargo, ya les ronda la zozobra pues deben economizar energía en sus celulares ante posibles interrupciones de ese vital servicio.