La noche más larga del títere desveló a Ciego de Ávila

Títeres al Centro, en la edición que recién concluyó, ensanchó horizontes y pujó por resistir

La noche más larga del títere es el cierre dorado de Títeres al Centro y este sábado no quedaron dudas. El bulevar avileño era una fiesta de punta a cabo y las tres plazas diseñadas para los espectáculos se quedaron pequeñas, frente a la muchedumbre de niños y padres, que corrieron cada vez que bajó el telón y llegó la invitación a moverse hasta el siguiente punto.

Fue Polichinela con Cinco actores en busca de un cuento, obra que narra de un modo diferente y fresco el clásico La Cucarachita Martina, quien inició las presentaciones. Después, le correspondió el turno al Guiñol de Guantánamo con Opalín y el Diablo, obra que teje la historia de un encuentro casual entre ambos personajes, cargado de peripecias titiriteras, efectos sonoros y juegos escénicos.

"Cinco actores en busca de un cuento" encontraron lugar en el portal de la AHS Ciego de Ávila , justamente en "Títeres...

Posted by AHS Ciego de Ávila on Saturday, November 5, 2022

Frente al portal del Fondo Cubano de Bienes Culturales actuaron la Compañía Teatral Mejunje con Estampas Literarias Teatralizadas y la Guerrilla de Teatreros, de Granma, quienes subieron la parada con títeres, payasos y variedades que lograron un intercambio armónico con los niños, quienes terminaron cantando, bailando y respondiendo cada una de las preguntas que los actores lanzaron al aire.

titeresUna culebra en apuros cautivó a los muchachos

Una culebra en apuros, con la técnica de títere de guante y la excelente proyección vocal de la artista, hizo del Guiñol de Guantánamo otro lujo sobre el escenario, y los muchachos correspondieron con las caras de asombro cada vez que la culebra se encogía y retorcía casi de manera natural.

La última parada del tren titiritero fue el parque Martí, pasadas ya las 11:00 de la noche, cuando parecía demasiado tarde para los niños. Sin embargo, contra todo pronóstico, el público no mermó y la hilaridad de cada actuación siguió sacando vítores y aplausos.

Mega Caramelazo fue la propuesta del cierre, la cual corrió a cargo de Polichinela y el Guiñol de Remedios, fusión dulcísima que demostró la versatilidad de los actores y la magia del teatro de muñecos, que aquí tuvo su plus bajo el cielo estrellado y con la satisfacción de haber cumplido un apretado cronograma de trabajo, cuando parecía menos probable. Títeres al Centro ensancha horizontes y puja por resistir.

titeres Así de concurrido estaba el parque Martí. Cualquiera pudiera pensar que las 12: 00 de la noche es demasiado tarde para los pequeños