“Habrá Asociación de Combatientes para siempre”

Asegura quien fuera presidente de la organización en el municipio de Ciego de Ávila

En varias ocasiones, hemos conversado de lo humano y lo divino, sobre todo, de su existencia y de los 32 años que dedicó en alma, corazón y vida a las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR).

Entre sus muchos recuerdos, siempre trae a colación aquel que lo remite a su infancia: el cajoncito con los féferes para limpiar zapatos, aunque, también, tuvo que realizar otras faenas para llevar unos centavos que ayudaran al sustento de la familia. Tal vez sea por eso que no puede olvidar su humilde origen.

“Nací en Punta Alegre, Chambas, hace 73 años, y por esas cosas del destino, me inscribieron en Morón. En octubre del ´60 me integré a la Asociación de Jóvenes Rebeldes y, un año después, formé parte de un batallón de combate para ir a Girón. Tenía 15 años y no me querían llevar.”

El teniente coronel Alfredo González Morell precisa que, al final, el batallón 417 no fue al escenario de la primera gran derrota del imperialismo en América, sino que lo enviaron hacia la Cívica, en Camagüey: “El 17 de abril nos llevaron para Turiguanó y, cuando finalizó la invasión, nos trasladaron para el territorio de Primero de Enero, a cortar caña.”

Hoy, mi entrevistado agradece a las FAR su formación integral. Pasó un curso vinculado a la Inteligencia Militar, luego participó en la Lucha Contra Bandidos, más adelante, lo enviaron a superarse culturalmente; ocupó cargos de oficial en diferentes especialidades y, en 1970, cumplió misión internacionalista en la República Popular de Angola. Durante su carrera militar, fue ascendido en seis ocasiones al grado inmediato superior y recibió numerosas condecoraciones.

Se jubila en 1993, año en que se crea la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana (ACRC). “Pertenecí a esa Asociación desde los primeros momentos fundacionales, cuando fue propuesto y elegido presidente de la asociación de base Adolfo Martínez Padrón, perteneciente al consejo popular Indalecio Montejo. En el 2006, me designan presidente de la dirección de la Asociación en el municipio de Ciego de Ávila, función en la que permanecí algo más de 11 años.

“Para mí, esa fue una experiencia muy positiva, que me enseñó a trabajar, organizar y cohesionar al colectivo; además, constituyó el mérito de haber dirigido a un grupo muy bueno y preparado. Siempre sentí como un gran honor liderar a compañeros con altos méritos en su quehacer militar y revolucionario. De ahí que la Dirección Municipal fuera calificada, en cada evaluación o visita, como una de las más integrales de la provincia.”

González Morell afirma que le gustó mucho la labor de la Asociación, que el próximo 7 de diciembre estará cumpliendo 25 años, y señaló como los aspectos más puntuales la atención a los problemas de los combatientes, las visitas a los centros estudiantiles para que los protagonistas del Ejército Rebelde, la Lucha Contra Bandidos, las misiones internacionalistas en Angola y otros lares les transmitieran, de primera mano, sus experiencias y vivencias, y contribuir así al reforzamiento de valores en las nuevas generaciones.

En su autorizada opinión, aseveró que la ACRC ha ido evolucionando con la creación de nuevas categorías para el crecimiento de la organización, para darle continuidad al proceso revolucionario. “Estoy convencido de que habrá ACRC para siempre, porque hay continuidad en el trabajo, lo que asegura el relevo; y fidelidad a los paradigmas que constituyen Fidel, Raúl y Almeida.”