Cuba vive días de colores. Quizás la fortaleza del sol acentúa la vivacidad de los matices cuando el calor fustiga rostros y consolida obras.
Se acerca el aniversario de una fecha que marca la historia criolla en los últimos 65 años. El 26 de Julio sigue siendo una jornada que duele por los hijos que la patria asumió en su martirologio, pero a la par de esas heridas emana el optimismo por hacer, crear, unir, levantar.
Ciego de Ávila tributa al homenaje con muchas faenas, aunque lo esencial radica el restituir los daños ocasionados por el huracán Irma, en septiembre último.
Parecía imposible que tanta destrucción pudiera resarcirse pero en la práctica se aprecian resultados. Mucho falta por hacer todavía, no obstante, quienes visiten lugares tan dañados como el consejo popular Máximo Gómez, en Chambas, verificará que las endebles viviendas arrasadas por el meteoro hoy renacen confortables, sólidas y elegantes. Se demuestra, como dijera Raúl, que ¡Sí se puede!
La juventud ha dado un aporte crucial
Cuba no dispone de abundantes recursos, pero lo poco que está al alcance se ha dispuesto para que el pueblo recupere sus bienes
En Morón serán entregadas 20 de las 50 petrocasas que se levantan aledañas a la comunidad El Carmen
Estas viviendas eran endebles barracones de madera
Asegurando los techos, por si “algún pariente de Irma” nos hace otra indeseada visita
Chambas, sede de las actividades centrales en Ciego de Ávila por el 26 de Julio, engalana sus fachadas
Para terminar estas viviendas fueron convocados trabajadores de las principales entidades de la provincia
Justo el momento de evitar que se vayan detalles
Otras obras de la provincia tuvieron temprana terminación, entre ellas, la remodelación del motel Itabo, en Baraguá, una de las mejores opciones avileñas para el verano